La Comunitat Valenciana cerrará el año 2011 con un déficit que prácticamente triplicará el objetivo marcado por el Gobierno, según se deduce del informe del Observatorio Fiscal y Financiero de las Comunidades Autónomas de la Fundación de Estudios de la Economía Aplicada (FEDEA), que estima que la Generalitat terminará 2011 con un déficit presupuestario de 3.333 millones de euros, un 3,18 % del Producto Interior Bruto (PIB). Estas cifras incluyen a la Comunitat Valenciana en el vagón de cola de las autonomías incumplidoras, encabezado por Castilla-La Mancha, que a pesar el duro plan de recortes aplicado por María Dolores de Cospedal podría cerrar el año con un déficit de 2.020 millones de euros, lo que significa un -5,48 % del PIB. Le sigue de cerca Murcia, que con 1.217 millones de euros de déficit, acaba 2011 con un 4,34 % y Baleares con un 3,15 % (852 millones de euros).

En conjunto, según el avance del Observatorio Fiscal y Financiero sobre unos datos que no se conocerán de forma oficial y con exactitud hasta el próximo mes de marzo de este año, la desviación sobre el objetivo de déficit previsto para 2011 será de un punto, ya que la media de las comunidades autónomas se situará en el 2,34 % frente al 1,3 % anunciado. Es decir, el déficit presupuestario estimado de las autonomías en 2011 se situaría en 25.318 millones de euros, cundo la directriz del Gobierno era que se quedara en 14.300 millones de euros; es decir, la desviación superará previsiblemente en este apartado los 11.000 millones de euros.

Desviación de 14.000 millones

Según el Observatorio de la Fundación, si la estimación de déficit presupuestario de las autonomías se traduce a términos de Contabilidad Nacional -sin tener en cuenta las liquidaciones asociadas al año 2009-, "concluimos que este será del 2,6 % del PIB". Es decir, que todas las comunidades incumplirían el objetivo de estabilidad del 1,3 %, "siendo en el agregado una desviación de 1,3 puntos del PIB, lo que supone en números absolutos más de 14.000 millones de euros de desviación, prácticamente lo que representa un presupuesto anual de la Generalitat Valenciana.

Esta desviación de déficit, sumada a la de los ayuntamientos -que rondará los 1.500 millones-, la Seguridad Social -alrededor de 5.000- y la Administración central -3.000- es la que ha puesto en alerta al Gobierno de Mariano Rajoy, que a las medidas ya adoptadas (recortes de gasto en ministerios, en subvenciones, moratoria en los nuevos casos menos graves de la Ley de Dependencia por periodo de un año, subida del IRPF y del IBI y el gravamen sobre las rentas de ahorro), deberá aplicar otras más severas para compensar los 25.000 millones de euros adicionales.

Previsión de nuevos ajustes

Hay que tener en cuenta que las medidas aprobadas en su segundo Consejo de Ministros sumaban alrededor de 15.000 millones -8.900 de la reducción de gasto y otros 6.000 de recaudación extra por las subidas fiscales-. Según el Observatorio, la desviación total sobre el objetivo de déficit en España, marcado en el 6 %, podría incluso superar el 7,8 %.

La fundación de Estudios ya advierte que las consecuencias de este fracaso son importantes, "no solo por la señal que tienen sobre nuestra capacidad de cumplir los objetivos de déficit. sino porque también hace necesario un ajuste más intenso del anunciado en el Programa de Estabilidad -3,4 puntos del PIB en vez de 1,6-, ya que el objetivo a cumplir en 2012 es un déficit del 4.4%.

"Hace falta un esfuerzo sin precedentes"

Para el Observatorio Fiscal y Financiero, la "consolidación fiscal es uno de los principales retos que va a afrontar la economía española en los próximos años", afectada como está por el excesivo precio que asume para la financiación y la desconfianza de los mercados en la capacidad de cumplimiento de la senda de ajuste. Para hacer frente a este desafío el Observatorio entiende que hace falta un "esfuerzo presupuestario sin precedentes". Además, según señalan, para alcanzar estos objetivos "no se podrá contar con algunas de las ayudas que tuvimos en la última etapa expansiva", refiriéndose a los ingresos extraordinarios ligados al boom inmobiliario, que suponían más del 4 % en recaudación extra del IVA, IRPF,cotizaciones sociales, Impuesto de Transmisiones Patrimoniales, Actos Jurídicos Documentados...

A ello se suma que la recuperación económica "está siendo muy lenta y afectando al resto de las fuentes de ingresos fiscales" y que la carga de intereses se está incrementando notablemente. "Basta recordar -señalan en el informe- que la reducción del gasto en intereses aportó más de un 30 % en la última consolidación fiscal 1995-2007". También señalan que si el objetivo de déficit de 2010 se cumplió, fue como consecuencia del esfuerzo de la Administración central -consiguió un déficit del 5 % del PIB frente al 5,9 %- respecto a las comunidades autónomas, que también incumplieron su compromiso de estabilizarse en el 2,4 %, ya que la media fue del 2,8 %. La C.Valenciana también ocupó entonces un lugar destacado en los incumplimientos.