El Banco de Sabadell pretende que empresarios e inversores valencianos se incorporen a su accionariado aprovechando la inminente ampliación de capital por mil millones que efectuará la entidad como consecuencia de la adjudicación del Banco CAM. La entidad catalana ya ha efectuado algún sondeo. Su presidente, Josep Oliu, aseguró ayer al respecto, en la presentación de resultados de 2011, que esta fórmula de buscar una mayor vinculación con la autonomía es la misma que ya puso en práctica con la absorción de otras entidades, como sucedió con el Banco Herrero y la sociedad asturiana. Oliu, por otro lado, dejó claro que el Sabadell no tiene ningún interés en la próxima subasta del Banco de Valencia, una entidad a la que aspiró en el pasado en numerosas ocasiones. "Estamos bastante ocupados" con la CAM, afirmó.

El consejero delegado del Sabadell, Jaume Guardiola, aseguró que no se han encontrado ninguna sorpresa en la entidad alicantina -"conocíamos bien su realidad"- y que el "ambiente del equipo y los clientes" de la caja es muy favorable para "una rápida recuperación" a partir del momento en que asuman su gestión. Otras fuentes de la entidad aseguraron que se ha conseguido detener la sangría de fuga de depósitos. Oliu reiteró que "no podemos hacer nada" respecto a las cuotas participativas, que han perdido su valor tras la intervención por parte del Banco de España, principalmente porque forman parte de los activos de la caja que no se transfirieron al Banco CAM, algo muy similar a lo que sucede con la obra social. El Sabadell no se hará cargo de la fundación, aunque, como banco, "tendremos una actividad de carácter social" como fórmula para potenciar el negocio. El proceso de integración culminará el 1 de enero de 2013. El propósito es que el Sabadell opere en la Comunitat Valenciana y Murcia -y tal vez también en Baleares- bajo la marca SabadellCAM. Asimismo, se baraja la creación en Alicante de un consejo consultivo.

Oliu dio cuenta del balance del banco del año pasado, en el que aún no figura la caja alicantina. El Sabadell obtuvo un beneficio neto de 231,9 millones, con un descenso del 39 %, tras efectuar unas provisiones de 1.048 millones. El core capital cerró el año en el 9,01 % (10,3 % si se tiene en cuenta el canje de participaciones preferentes por acciones por 718 millones), mientras que la morosidad se situó en el 5,95 %, frente al 7 % de media del sector y al 5,01 % de un año antes. El banco catalán se adjudicó inmuebles el año pasado por valor de 1.653 millones, si bien efectuó ventas por 527. La cartera inmobiliaria bruta de la entidad, que redujo en 46 su número de oficinas, asciende a 4.006 millones, con una cobertura del 29 %.

En la Comunitat Valenciana, su volumen de negocio, entre créditos y depósitos, superó al cierre de 2011 los 9.100 millones, con un incremento del 18 %. La autonomía se ha convertido en la tercera en importancia para la entidad tras Cataluña y Madrid.

Unas provisiones

"exageradas"

El presidente del Banco Sabadell, Josep Oliu, calificó ayer de "exageradas" las exigencias de provisiones que va a efectuar en breve el Gobierno para sanear el balance de las entidades por su exposición al sector inmobiliario, que el ministro de Economía ha situado en unos 50.000 millones. Pese a esta opinión, expresó su esperanza en que "el mercado vea este esfuerzo". La entidad afrontará vencimientos de deuda por 11.000 millones de euros este año, de los que 7.000 corresponderán a la CAM. El director financiero de Banco Sabadell, Tomás Varela, explicó que la entidad ha captado financiación por 4.000 millones en el Banco Central Europeo (BCE), al que el Sabadell no había recurrido desde hacía un año, y que esa liquidez ha servido para adquirir deuda soberana y anticipar la cobertura de los citados vencimientos. j. c. barcelona