Bankia comenzó ayer la última fase de la fusión tecnológica de su red de sucursales y cajeros automáticos -no sin algunos problemas puntuales- con la integración de las 1.005 oficinas de Bancaja con las 1.800 de Caja Madrid y Caja Ávila, lo que supone en la práctica el 90 % de estructura global (faltan las de las entidades Caixa Segovia, Caixa Laietana, Caja Rioja y Caja de Canarias). La entidad presidida por Rodrigo Rato prevé generar un ahorro en costes operativos de 500 millones de euros durante este año con dicha integración, cifra que se elevará a 700 millones en 2013, y acelera así una reestructuración que pone fin a la personalidad y la imagen de la caja valenciana.
La entidad resultante de la fusión tecnológica de Caja Madrid con Bancaja y otras firmas de menor tamaño se produce después de un intenso período de trabajo durante los pasados días festivos de Semana Santa, en los que parte de la plantilla ha tenido que trabajar y Bankia ha reforzado las red de sucursales de Bancaja en toda España con más de 400 personas que prestarán su apoyo durante, al menos, treinta días.
Anomalías en la operativa
Según algunos clientes de la entidad financiera, durante estos últimos días se han producido algunas anomalías en cajeros automáticos de Bancaja que no permitían sacar dinero en efectivo. Por otro lado, también se han registrado algunos errores en cuentas de ahorro al anotar cargos ya realizados y saldos incorrectos. Sea como fuere, desde Bankia aseguraron ayer que el proceso "se ha realizado en un tiempo récord", adelantándose en dos meses al objetivo previsto por la entidad, y la normalidad ha sido la tónica habitual durante estas jornadas festivas que han sido aprovechadas para dar el paso definitivo de la integración. Las asociación de consumidores Ausbanc y Adicae no tienen constancia de graves problemas en este proceso de reestructuración tecnológica del grupo financiero. Según las previsiones del grupo durante el primer trimestre de ese año estarán totalmente integradas sus 3.248 sucursales.
Además, desde principios del verano de 2012 Caixa Laietana y Caja Segovia podrían compartir la tecnología de Bankia, con lo que sólo se dejaría para principios de 2013 las redes de La Caja de Canarias y Caja Rioja. Cualquier usuario que estos días acuda por internet para operar con bancaja.es recibe un mensaje de bienvenida a la web de Bankia, un diseño que recuerda más al de Caja Madrid que a Bancaja. Además, el histórico código 2077, de Bancaja, desparece y en las cuentas figura el de Bankia, el 2038. Para el consejero delegado del grupo financiero, Francisco Verdú, llegar al 90 % de la integración "es el paso definitivo de la mayor fusión financiera de España en uno de los entornos económicos más difíciles del país".
La entidad realiza este nuevo paso para su integración definitiva tras haber cerrado 817 oficinas y reducir en un 16 % los gastos de explotación. Estos ajustes se adelantan un año con respecto al plan inicial, y ha supuesto un recorte del 20 % de la red de sucursales y del 16 % de la plantilla. Al cierre de 2011, Bankia poseía una cuota de mercado del 11 % en créditos y del 10,7 % en depósitos. Con respecto a la morosidad, la tasa se situó al final del ejercicio en el 7,6 %, por encima del 5,5 % del año anterior.
