La Unió de Llauradors denunció ayer el descenso de precios en origen de la patata de temporada de la Comunitat Valenciana del 50% respecto a los percibidos el año pasado -que ya fueron desastrosos- a causa de la oferta masiva de patatas viejas francesas que comercializa la gran distribución en vez de apostar por el producto local. La campaña del tubérculo se inició a principios de mayo y acostumbra a ser muy apreciada por el mercado, pues es la primera de la temporada y tiene mucha más calidad que otros cultivos del resto de España o del exterior.

La sorpresa de este año es que la patata temprana de gran calidad se está pagando en origen a unos precios ridículos y muchos más bajos que el anterior. Mientras que el año pasado el valor percibido por el productor fue de 0,18 euros por kilogramo, este año está percibiendo tan sólo 0,09 céntimos de euros. Hay que tener en cuenta que el coste de producción oscila entre los 0,12 y los 0,19 euros por kilogramo, según datos del Ministerio de Agricultura correspondientes a 2009.

El secretario general de la Unió, Ramón Mampel, lamenta que la gran distribución prefiera comercializar la patata vieja francesa, que compra entre 0,06 y 0,10 ?/kilo ya envasada para convertirla en un producto de reclamo. Además, la distribución la lava para darle aspecto de nueva y la etiqueta como patata de "conservación".