El larguísimo listado de 33 exconsejeros imputados por el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu tras la querella presentada contra Bankia y su matriz BFA por UPyD adolece de cuatro ausencias significativas: las de los vocales de la entidad cotizada Juan Martín Queralt, de la que informó ayer este diario, Virgilio Zapatero, Álvaro de Ulloa y Claudio Aguirre.

Fuentes oficiales de la formación política liderada por Rosa Díez explicaron ayer que sus servicios jurídicos, dados los numerosos cambios que se han producido en los consejos de administración de Bankia y BFA desde la constitución de este último en diciembre de 2010, tuvieron que delimitar una fecha para determinar quiénes eran los posibles responsables del hundimiento de la entidad y eligieron la salida a Bolsa de la misma. Concretamente, se atuvieron al folleto de la oferta pública de venta de acciones remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) el 29 de junio de 2011. En efecto, en dicho documento, el consejo de Bankia estaba constituido por quince miembros, incluido el presidente, Rodrigo Rato, el vicepresidente, José Luis Olivas, y el consejero delegado, Francisco Verdú.

Los cuatro vocales no imputados fueron nombrados con posterioridad a la remisión del folleto y pocos días antes de que la entidad empezara a cotizar en los mercados el 20 de julio del año pasado. En concreto, Álvaro de Ulloa, que había de-sempeñado diferentes cargos ejecutivos en Banco de Extremadura, Banca Garriga Nogués y Banco de Madrid (Banesto), fue nombrado el 5 de julio. Seis días más tarde le tocó el turno al catedrático de Derecho Financiero de la Universitat de València Juan Martín Queralt, al exresponsable de Merrill Lynch en España y Portugal y primo de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, Claudio Aguirre, y al exministro socialista Virgilio Zapatero. Este último, un histórico de Caja Madrid, formó parte desde el principio del consejo de la matriz de Bankia, si bien dejó el cargo el 16 de junio para ser nombrado el 11 de julio en la filial.

Lo llamativo de todo esto es que sí figure en la querella el expresidente de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), Francisco Pons, quien entró en Bankia/BFA en enero de 2012 como vicepresidente en sustitución de José Luis Olivas, quien se vio forzado a dimitir el 21 de noviembre de 2011 tras la intervención del Banco de Valencia. Pons no estaba en junio del año pasado, aunque es cierto que ejerció durante cuatro meses un cargo muy relevante en la entidad. De todas formas, las citadas fuentes de UPyD aseguraron a este diario que el proceso no acaba más que empezar, que habrán nuevas diligencias y que fruto de las mismas es del todo lógico que surjan más imputados, entre los cuales podrían estar los mencionados.

De los 33 citados por el juez, once son valencianos. Fuentes próximas a alguno de los afectados aseguraron que todavía no habían recibido la imputación y que, en cuanto les llegue, tendrán que buscar abogado. El juez prevé que declaren lo antes posible, puede que antes de final de mes. Hay serenidad entre los consejeros consultados -y resignación-, aunque alguno ya adelanta indirectamente cuál podría ser su defensa, al apuntar a los sucesivos cambios normativos y exigencias gubernamentales y a las "imposiciones de las autoridades" que dieron como fruto el nacimiento de Bankia con la unión de Bancaja y Caja Madrid.

Por otro lado, fuentes jurídicas aseguran que es posible pero altamente improbable que esta causa se sume a la que instruye otro juez de la Audiencia Nacional por la denuncia del FROB contra el Banco de Valencia por tratarse de intereses dispares y distintos afectados. El juez Andreu, en el auto conocido el miércoles, reclamaba información sobre las irregularidades en el banco que estuvo controlado por BFA.