La polémica generada por la posible supresión de la ayuda de 400 euros a los desempleados que han agotado el resto de prestaciones -que finalmente obligó al Gobierno a dar marcha atrás- ha vuelto a poner sobre la mesa el enorme problema que supone la gran cantidad de parados de larga duración que está dejando una crisis mucho más prolongada de lo que nadie podía prever.

En la Comunidad Valenciana ya son 373.800 las personas que llevan más de un año buscando empleo sin ningún éxito, lo que supone un incremento de más del 33% sobre las cifras que se registraban en el segundo trimestre de 2011, según datos de la Encuesta de Población Activa facilitados por CC OO.

Este colectivo, además, ya representa más del 55% de todos los desocupados de la autonomía, según las mismas fuentes, y todo apunta a que seguirá aumentando en los próximos meses, mientras la economía española no consiga crecer a un ritmo suficiente como para crear nuevos puestos de trabajo. "Los datos son demoledores y reflejan de forma muy evidente la paralización de nuestro mercado de trabajo. Sin estímulos que generen actividad, y por lo tanto empleos, es imposible que se salga de esta situación de crisis", se lamenta el portavoz de CC OO, Salvador Roig.

Especialmente preocupante resulta la situación de los que ya superan los dos años sin trabajar -más de 218.000 personas en toda la Comunidad, el 32% de todos los desempleados- y no sólo por el empobrecimiento y el estado de necesidad que suelen acompañar a un paro tan prolongado. El mayor riesgo para estos parados es que las empresas les den la espalda definitivamente y acaben excluidos para siempre del mercado laboral, condenándolos a transitar el resto de su vida laboral entre empleos ocasionales y la ayuda de los diferentes servicios sociales.

El propio Servicio Público de Empleo Estatal incluye a este colectivo entre los de "difícil inserción" y las cifras oficiales del Plan Prepara que el Ministerio de Empleo difundió esta semaña señalaban que sólo un 6% de los beneficiarios logró ocuparse, a pesar de que muchos de ellos no llevaban tanto tiempo en el paro. Por el contrario, la cifra de desempleados que lleva menos de un año buscando trabajo incluso se ha reducido en el último año (un 5,5 %),

Sin programas de formación

Y lo peor es que, en plena crisis y cuando más se necesitan, los recortes presupuestarios se han llevado por delante buena parte de los programas de formación y orientación profesional, según denuncia Roig, "lo que todavía hace más difícil su salida del paro". "Lamentablemente, la capacidad del tejido empresarial valenciano para destruir empleos parece que no tiene fin, todo lo contrario, la Reforma Laboral ha provocado un aumento de los despidos", añade el sindicalista, que también muestra su preocupación por el agravamiento de la crisis que puede acarrear la próxima subida del IVA.