La crisis económica afecta también de lleno al transporte marítimo de mercancías. La organización International Transport Workers Federation (ITF) ha hecho público un informe donde constata que al menos once buques permanecen abandonados en los puertos españoles -uno de ellos en Valencia- como consecuencia de impagos a la tripulación, administraciones públicas y proveedores privados, según reconoció ayer a Levante-EMV el dirigente de ITF-UGT José Manuel Ortega.

El recinto del Grao todavía mantiene en sus instalaciones, en el muelle de la Xità el cementero "Naftocement XVI", un buque hasta hace poco en manos de la compañía naviera griega Naftotrade Shipping. La embarcación, con bandera de Malta, ya sin tripulación (contaba con cerca de una veintena de trabajadores), permanece cuenta con unos ocho embargos de acreedores y no puede abandonar la terminal.

Un barco que recientemente abandonó las instalaciones del puerto de Valencia tras un embargo es el "Helly", de una armador de Estonia, que permaneció retenido en el puerto más de un año. Tras una subasta pública cayó en manos de otra naviera. En la actualidad el puerto que mayor número de barcos abandonados tiene es Algeciras con cuatro, todos ellos de la compañía Comarit Comanav. Después del puerto andaluz están Ceuta con dos y Tenerife, Tarragona, Las Palmas de Gran Canaria y Almería, todos ellos con uno. International Transport Workers Federation presta servicios a los tripulantes de estas embarcaciones, que en muchas ocasiones llevan varios meses sin cobrar sus nóminas.

Según Ortega, la crisis económica y el estancamiento de del comercio internacional "dispara las deudas salariales de algunas navieras con la tripulación, lo que incrementa las órdenes de embargo cuenco los buques escalan en los puertos españolas". ITF asegura que los problemas financieros afectan tanto a los buques graneleros como los portacontenedores.