La comisión europarlamentaria celebró la "lista negativa" creada para ajustar la definición de agricultor activo y evitar que se destinen fondos de la PAC a campos de golf y aeropuertos. Las divergencias que frenaron el acuerdo definitivo tenían que ver con la transferencia de fondos, la tasa de cofinanciación de los programas de desarrollo rural y la opción de fijar un techo de 300.000 euros a las ayudas por explotación (lo que beneficia a los grandes terratenientes). Los 28 países de la Unión Europea se negaban a discutir estos elementos al considerar que quedaron definidos por los jefes de Estado y de Gobierno en febrero, pero los eurodiputados amenazaban con rechazar el acuerdo global si no se trataban. Finalmente, la Eurocámara no ha logrado hacer obligatorio ese tope máximo de las ayudas, pero a cambio ha obtenido una reducción progresiva, también llamada "degresividad", por la que se aplicará una rebaja del 5 % en el pago básico de las ayudas de más de 150.000 euros por explotación y año. En la nueva PAC destaca que un tercio de las ayudas se vincularán con la apuesta por la ecología, donde sí se ha reconocido la contribución de las cultivos de cítricos, que tendrán ayudas, para reducir el C02. levante-emv.valencia