Los secretarios generales de UGT y CC OO-PV, Conrado Hernández y Paco Molina, respectivamente, coincidieron ayer al asegurar que sus organizaciones sindicales no descartan emprender acciones judiciales contra el Consell por las deudas de 22 millones de euros (11 millones a cada central) que el Ejecutivo autonómico de Alberto Fabra mantiene en diversos programas de fomento del empleo y cursos de formación profesional desde hace más de dos ejercicios.
Las centrales mayoritarias consideran «vergonzante» tener que llegar a ese punto de enfrentamiento con el Consell, a quien acusan de desviar fondos finalistas procedentes de la Unión Europea (UE) o del Gobierno central a otras partidas debido a los problemas de tesorería en las diferentes administraciones autonómicas. Esta situación impide a los sindicatos participar del plan de pago a los proveedores del Consell según los criterios que fija el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas. «Estamos en un limbo jurídico porque los pagos pendientes del Consell con los sindicatos no forman parte de su deuda, ya que estos han sido transferidos, aunque destinados a otras usos diferentes al empleo y la formación», lamentaba ayer el líder de Comisiones Obreras. En 2013, las organizaciones sindicales han denunciado que «no existen programas de formación porque no se paga nada».
Presupuestos irreales
Hernández tildó de «ficticios» e «irreales» los Presupuestos Generales de la Generalitat para 2014. Según Hernández, en políticas activas caen un 12 % respecto al año precedente, pese a la existencia de 700.000 parados en la C. Valenciana, que ya cuenta con 215.000 hogares donde todos sus miembros están en paro y la mitad de todos los desempleados tiene más de 55 años. Por su parte, Molina calificó de «virtuales» las cuentas de ingresos y gastos de la administración autonómica ya que al final del ejercicio contrastan con el «escaso grado de ejecución».
