La galopante pérdida de rentabilidad y el imparable envejecimiento de la población dedicada a esta actividad están arrinconando cada vez más a la agricultura valenciana, que este año va a ver cómo caen en el abandono 8.065 hectáreas de superficie de cultivo. La situación ha llegado a tal límite que una de cada cinco hectáreas se encuentra en situación de desuso. Y es que la superficie agraria valenciana en 2013 asciende a 782.308 hectáreas, de las cuales solo 614.650 están siendo cultivadas. Por tanto, las restantes 167.658 han sido abandonadas. Estamos hablando de un 21,43 % del total. Si echamos la vista a una década atrás, cuando la superficie agraria abandonada era de 120.911 hectáreas, el incremento que se ha producido entre 2003 y 2013 es de un 38,6 %.

La "gravedad de la situación", según explicó ayer la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) en un comunicado, crece si tenemos en cuenta que en 2013 la superficie cultivada en España aumentó en 10.277 hectáreas (un 0,93 %), que el descenso experimentado por la Comunitat Valenciana es el mayor registrado por una autonomía y, muy especialmente, que las dos principales regiones competidoras de esta han tenido este año sensibles incrementos: Andalucía, un 4,79 % y Murcia, un 5,73 %.

AVA, que cita datos del Ministerio de Agricultura, considera que la mencionada caída obedece a dos factores, fundamentalmente. Por una parte, la cada vez menor rentabilidad que los agricultores obtienen de sus producciones, así como al envejecimiento en un sector caracterizado además por el minifundismo. "No hay cambio generacional y si encima pierdes dinero es lógico que se abandonen las tierras", aseguran fuentes de la organización, que lamentan además el inesperado cambio experimentado en el último año. Y es que en 2012 se produjo un aumento de las tierras cultivadas del 4,16 % -6.926 hectáreas-, lo que la organización achacó a un efecto de la crisis económica, en tanto en cuanto parecía que había valencianos que habían vuelto al campo ante la falta de perspectivas en otros sectores. Sin embargo, el descenso de 2013 pondría de relieve que ese valor refugio de la agricultura se ha perdido en la Comunitat Valenciana, si bien en el resto de España sí se mantiene esa tendencia. Ante esta situación, el presidente de AVA, Cristóbal Aguado, pidió ayer medidas en tres frentes: investigación, reconversión y actuar sobre la cadena alimentaria para mejorar la rentabilidad.

Los productos que han registrado este año un mayor descenso en el número de hectáreas dedicadas a su cultivo son los cereales y los producidos en viveros, principalmente plantones y flores. Los primeros redujeron su superficie en un 6,8 %, mientras que los segundos lo hicieron en un 7,5 %. La superficie de cítricos abandonada fue del 1,5 %, mientras que la de hortalizas ha subido un 12 %. El dato sobre viveros corrobora la crisis que padece este subsector agrario como consecuencia, entre otros motivos, de la decisión del Gobierno de aplicar a estas produccciones un IVA del 21 % con la última subida fiscal, mientras que el resto del sector agrario padece un Impuesto sobre el Valor Añadido del 12 %. Recientemente, AVA hizo pública una nota en la que aseguraba que el 15 % de los viveros valencianos había cerrado debido a un aumento tributario que este sector considera injusto porque no se ve ajeno al mundo agrario y, por tanto, cree que se le debería aplicar un 12 % en el IVA. j. c.valencia