El comité ejecutivo de Feria Valencia aprobó ayer las cuentas de la institución para 2014 y el cierre del ejercicio de 2013, en el que la empresa pública registró unas pérdidas de aproximadamente nueve millones de euros, es decir, el doble de los 4,5 millones en números rojos que obtuvo en 2012.

En ese ejercicio, las pérdidas se habían moderado un 41 % en relación a las contabilizadas en 2011, pero ahora han vuelto a subir, debido fundamentalmente, según las fuentes consultadas, a que certámenes como Fimma-Maderalia o el Hábitat han sido retrasados a 2014. Queda por ver ahora qué dotaciones hará la institución ante el ajuste de personal al que se verá abocada en 2014, tal como ya adelantó la dirección al comité de empresa.

El patronato de Feria Valencia de diciembre, que se reúne el próximo lunes, no aprobará el proyecto para separar la institución en dos empresas, según fuentes de la institución. La iniciativa tenía como propósito crear una firma que desarrollaría el negocio, mientras que la actual se haría cargo del patrimonio y de las elevadas deudas por las obras de ampliación.

La idea inicial era aprobarla en el patronato de diciembre, pero la dimisión en octubre de Alberto Catalá y su sustitución en la presidencia por José Vicente González ha propiciado el retraso del proyecto. González se ha centrado en este mes y medio en revisar el plan de negocio y en preparar los presupuestos que el patronato sí aprobará el lunes. Para más adelante quedarán otras cuestiones estratégicas. Tampoco se ha reunido formalmente con el conseller de Hacienda, Juan Carlos Moragues, para tratar sobre el aval de tres millones pedido a la Generalitat.