La presunta ocultación parcial de una herencia ha abierto una guerra entre dos clanes empresariales de renombre en España. Por un lado, una hija del expresidente del Valencia club de fútbol y hermano del dueño de Mercadona, Francisco Roig. Por el otro, los Reizábal, que en diciembre de 2006 vendieron a El Corte Inglés por unos 500 millones de euros una firma inmobiliaria entre cuyos activos figuraban los terrenos del Edificio Windsor de Madrid, que se incendió en febrero de 2005, y un 20 % de la Torre Picasso, también en la capital. Este diario contactó ayer con los patriarcas de ambos clanes, pero tanto Francisco Roig como Florentino Reizábal „a la rama de su familia le correspondieron unos 100 millones por el Windsor„, no quisieron pronunciarse sobre el contencioso, más allá de ratificar su existencia, de la que también ayer dio cumplida cuenta el digital Elconfidencial.

El conflicto se origina a partir de la muerte en 2012 a los 42 años por un infarto de Javier Reizábal, esposo de Ángela Roig y padre de sus dos hijos. Esta, según el citado rotativo, confió en su suegro, Florentino Reyzábal, garante de que sus nietos recibieran la herencia de su padre. Tras valorar los bienes y llegar a un acuerdo con Ángela Roig para que renunciara en favor de sus hijos a parte de la herencia que le dejó su marido, fundamentalmente acciones de una sociedad familiar, y asumiera las deudas que este tenía, la escritura de adjudicación de la herencia se firmó el 27 de septiembre de 2012. El problema se inicia cuando la hija de Francisco Roig descubre con posterioridad que en el citado reparto se habían ocultado varios fideicomisos en México de los que debería haberse hecho partícipes a los hijos de Javier Reyzábal y que estaban valorados en unos 15 millones de euros. Estos bienes procedían de la herencia que a Javier le correspondía de su fallecida madre, mexicana de origen.

A partir de ese momento, se produce una retahila de burofaxes y solicitudes de información por parte de Ángela Roig para lograr que su suegro, sus cuñadas Blanca y Mónica y el tío de estas por parte de madre, Gregorio Gómez, aclaren qué bienes les corresponden a sus hijos. La guerra familiar ha llegado al punto de que Ángela Roig ha tenido que interponer dos denuncias „la última el pasado 28 de octubre„ ante la polícia de la localidad madrileña de Pozuelo de Alarcón contra Blanca Reyzábal por supuestas agresiones.

Pese a todo, según el relato del citado rotativo, la insistencia de Roig ha tenido como un primer fruto el reconocimiento por parte de su suegro de la existencia de algunos bienes en México sobre los que los hijos de Ángela tienen derecho a una participación. Florentino Reyzábal había alegado inicialmente que no había tenido conocimiento de esos activos, dado que correspondían a una herencia de su esposa en la que él no participaba, hasta que sus hijas le comunicaron su existencia. Ahora, la hija del expresidente del Valencia C. F. baraja, según Elconfidencial, la opción de acudir a los tribunales para aclarar si sus hijos quedaron excluidos de parte de la herencia, si hay más bienes que les corresponden y si en el desarrollo del conflicto se han producido presuntos delitos de estafa y apropiación indebida.