Los profesionales de la Comunitat Valenciana sufrieron durante el pasado mes de enero un total de 3.490 accidentes de trabajo. Así lo atestiguan las últimas estadísticas hechas públicas por el Ministerio de Empleo, que permiten identificar el primer repunte en las bajas laborales desde la irrupción de la crisis en 2008.

El galopante ascenso del desempleo y la consecuente falta de oportunidades en un mercado de trabajo asfixiado han causado un descenso prácticamente regular en los registros oficiales sobre accidentes laborales en la Comunitat Valenciana de los últimos siete años. Aunque podría parecer un patrón positivo, lo cierto es que el recorte en el número de bajas ha estado ocasionado en gran parte por el drástico descenso del número de ciudadanos en activo. Además, la reforma laboral „que abarató el despido„ también ha actuado como un elemento clave en esta tendencia.

Ahora, con una ligera mejora en los datos globales que definen el mercado laboral „que muchos expertos ya empiezan a enlazar con la llegada de la recuperación económica„ se registra un relativo aumento del 4 % si comparamos los registros pertenecientes al mes de enero de los ejercicios 2014 y 2015.

Sin embargo, los números siguen estando bastante alejados de las cifras de los años anteriores a la crisis. Si se compara el dato del primer mes de 2008 „donde se contabilizaron un total de 9.247 accidentes„ con el perteneciente a enero del presente año se constata un recorte del 63 %.

En dicho intervalo temporal perdieron su trabajo más de 300.000 residentes en la Comunitat Valenciana.

Por tipología, la gran mayoría de incidentes computados durante el pasado mes de enero „3.019„ fueron siniestros de carácter leve. A su vez, también se registraron once percances graves y se lamentaron seis victimas mortales.

Por otra parte, también se contabilizaron 454 accidentes in itinere „13 % del total„, ocasionados durante el desplazamiento entre el domicilio del trabajador al centro de trabajo. O viceversa.