La economía de Estados Unidos se estancó en el primer trimestre del año, con un crecimiento a un ritmo anual de apenas un 0,2 %, a causa de un dólar fuerte que frenó las exportaciones, la caída de la inversión empresarial y la dureza del invierno, según informó ayer el Departamento de Comercio. El Gobierno divulgó el primero de sus tres cálculos sobre el comportamiento del Producto Interior Bruto (PIB) entre enero y marzo, y ese leve avance del 0,2 % fue inferior al 1 % estimado por los analistas y supone un fuerte retroceso respecto al crecimiento del 2,2 % registrado de octubre a diciembre.