La Universidad Politécnica de Valencia abrió en septiembre de 2014 un expediente de información reservada después de que la Fundación Instituto Valenciano de Tecnología (Invate) denunciase el cruce de convenios aprobado por el anterior patronato y los responsables de varios centros tecnológicos y el impago de parte de los vencimientos de deuda acordados en los mismos.
Fuentes de la Politécnica admitieron ayer que el expediente sigue abierto pero evitaron dar detalles de su recorrido y de si de él se han derivado responsabilidades. Según explicaron, no ofrecerán su opinión hasta conocer el alcance de la investigación judicial.
Los expedientes de información reservada son un mecanismo de investigación interno de las Administraciones Públicas previos a expedientes sancionadores, aunque en este caso la UPV no ha querido informar de si el procedimiento ha terminado en algún tipo de media disciplinaria.
En cualquier caso, al no contar el LabHuman con personalidad jurídica propia la UPV es responsable de la devolución del préstamo que adeuda al Invate.
Este diario también trató de contactar con Andrés Moratal, director del Centro de Trasferencia de Tecnología de la Universidad Politécnica de Valencia para conocer su versión de los hechos, pero los servicios de comunicación de la institución académica no lograron localizarle.
