La constructora y promotora Urbem, una de las grandes firmas del sector del ladrillo en la Comunitat Valenciana, ha presentado un expediente judicial de concurso voluntario de acreedores ante la imposibilidad de refinanciar una deuda de 49 millones de euros, principalmente con entidades financieras. La compañía de la familia Pastor atribuye esta crisis financiera a la inseguridad jurídica que genera su largo contencioso con Cleop „otra promotora valenciana„ por la mayoría accionarial y la administración del grupo. Esta «batalla empresarial» entre dos de las grandes mercantiles del negocio constructor e inmobiliario se prolonga desde 2006.

El objetivo del concurso, según los propietarios de la empresa, es «mantener con vida la empresa, salvar los puestos de trabajo y evitar la liquidación». Además, la solicitud del citado expediente sólo afecta a las actividades vinculadas con el negocio inmobiliario de este grupo que creció, sobre todo, con el desarrollo del PAI de la avenida de Francia y de Benimaclet, en la actualidad paralizado. Los propietarios de Urbem mantendrán las actividades vinculadas con el turismo (hotel Primus) y diversos arrendamientos.

La compañía cuyo administrador único es José Pastor „su familia controla el 67,26 % del capital social, frente al 32,73 % de Cleop„ solicitó acogerse al preconcurso de acreedores en los juzgados de lo Mercantil de Valencia en enero de 2014. La sociedad arrastraba un elevado pasivo con sus principales acreedores financieros: Banco Santander (alrededor de 25 millones) y Sareb (10 millones) y en menor medida, BBVA y CaixaBank. Su patrimonio neto se aproxima a los 70 millones. La sociedad ha llegado a esta situación con por la asunción de las hipotecas de viviendas que no se vendieron al término de su construcción „unas 150 viviendas„, que incluso ha obligado a pedir préstamos para hacerles frente, y a algunas financiaciones de compras de solares.

La reciente decisión de la Audiencia Provincial de Valencia cuestionando las ampliaciones de capital de la saga de los Pastor «ha enturbiado» los planes que manejaba la mercantil para formalizar los acuerdos de refinanciación con sus acreedores. El pasado día 6 de mayo la Audiencia Provincial revocó una sentencia del Juzgado de lo Mercantil número 1 y anulaba la ampliación de capital suscrita por la familia Pastor. Este contencioso ha sido recurrido ante el Tribunal Supremo.

Tras la suspensión de pagos, los propietarios de Urbem, esperan superar la crisis económica con un convenio que incluya quitas, daciones en pago y capitalización de deudas.