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Contrato de reafinanciamiento

La SGR originó a la Generalitat un quebranto de 80 millones en 2014

La administración tiene que hacerse cargo del 40 % de las pérdidas de los avales fallidos de la Sociedad de Garantía Recíproca hasta 2013 - Esta semana, el Consell ha abonado un primer pago de 20 millones; el resto se pagará en plazos anuales hasta 2018

La SGR originó a la Generalitat un quebranto de 80 millones en 2014

La factura de la salvación de la Sociedad de Garantía Reciproca (SGR) de la Comunitat Valenciana no deja de crecer para la Generalitat. Ya supera los 360 millones y seguirá aumentando en los próximos ejercicios como consecuencia del contrato de reafinanciamiento suscrito entre ambas partes por el que la administración autonómica tiene que pagar el 40 % de los avales fallidos que genere la entidad hasta 2013. La Cuenta General de 2014 de la Generalitat, hecha pública la semana pasada, reveló una deuda por la SGR de 107 millones. Según fuentes de la conselleria de Hacienda, esa cantidad es la pesada losa del citado contrato, que solo en 2014 causó un quebranto a la administración autonómica de 80 millones de euros.

El contrato de reafinanciamiento „un aval sobre avales„ fue suscrito inicialmente en 1992, si bien la versión actual, que hace responsable a la Generalitat de un 40 % de las pérdidas por fallidos, se remonta a 2000. La vinculación tenía fecha de caducidad: 2013. Así que está incluida toda la etapa de desvarío en la gestión „exceso de crédito inmobiliario con pobres garantías y volúmenes excesivos para una firma pensada para ayudar a las pymes„ que a punto estuvo de provocar la desaparición de la SGR en 2013 y que se evitó tras un acuerdo entre la Generalitat y la banca que supuso para la primera la inyección de 60 millones en el capital de la sociedad y la firma de un aval por otros 200 millones que le dieron liquidez para seguir operando.

Ejecución

En cuanto la SGR volvió a tener músculo, los bancos empezaron a ejecutar los créditos incobrables que la sociedad había avalado antes de 2013. Esta última se hizo cargo de su parte y la Generalitat, en virtud del citado contrato, de la suya, es decir, un 40 % de las pérdidas totales de cada aval. El año pasado afloraron, como ha quedado dicho, 80 millones, a los que hay que sumar los 27 del ejercicio anterior. En el futuro, las pérdidas aumentarán. Se desconoce la cifra final, pero algunas estimaciones apuntan a que llegará a los 200 millones.

El contrato de reafinanciamiento incluye un calendario de pagos. Las pérdidas que afloren en 2014 se pagarán en cuatro recibos anuales de un 25 % del total cada uno de ellos. El primero correspondía abonarlo antes de finalizar este mes de julio y fue una de las múltiples sorpresas que se ha llevado el nuevo equipo de la conselleria de Hacienda que dirige el socialista Vicent Soler. Las fuentes consultadas explicaron que, ante el inesperado requerimiento de los bancos, este departamento de la Generallitat, dirigido en la última etapa del PP al frente del Consell por Juan Carlos Moragues, pidió un informe a la Intervención General para asegurarse de la legalidad de este pago. Dada la respuesta positiva, ya ha efectuado el primer abono, que asciende a 20 millones de euros. La misma cantidad deberá pagarla en julio de 2016 y en el mismo mes de 2017 y 2018 para liquidar esa deuda. Los avales fallidos que surjan en 2015 se abonarán en tres pagos anuales, también hasta 2018, mientras que los de 2016 se reintegrarán en dos tandas y los de 2017, en una, con lo que se pondrá punto y final a esta deuda.

La conselleria de Hacienda confía en que el quebranto se quede ahí. Tras la recapitalización y el cambio en los órganos de gobierno, el equipo capitaneado por Santiago de Santos desde la dirección general ha dado un giro sustancial a la política de la SGR, con «operaciones coherentes, sin nada que ver con la construcción y con avales más pequeños», según fuentes de este departamento del Consell.

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