Las tres ramas familiares de la saga industrial de los Lladró han aparcado sus diferencias tras la ruptura protagonizada en 2007 para intentar así sacar de la profunda crisis a la fábrica de Tavernes Blanques, que en 2014 perdió 4,4 millones y las ventas se desplomaron un 11,9 % hasta los 37,7 millones. La junta general extraordinaria de Sodigei „la matriz de Lladró S.A„ aprobó ayer la ampliación de los consejos de administración de tres a cinco miembros para dar entrada a Maria del Carmen Lladró Castelló (hija de José Lladró) y David Lladró Roig (hijo de Vicente Lladró) en ambas sociedades.

El cónclave celebrado ayer en Tavernes Blanques garantizará a partir de ahora a los representantes de los accionistas minoritarios de la Ciudad de la Porcelana „que aglutinan el 30 % de la propiedad„ participar en la toma de decisiones y de la gestión, tareas que desde hace una década quedaron en exclusiva en manos de la saga del confundador Juan Lladró, propietaria del 70 % de la mercantil. «Los miembros se unen para avanzar juntos y demostrar un renovado y firme compromiso con la marca, líder mundial en diseño y elaboración de porcelana artística, fundada hace 62 años por los hermanos Juan, José y Vicente Lladró». Así lo reconoce un comunicado oficial de Sodigei al término de la junta, con lo que descarta, al menos en el corto plazo, la venta del negocio cerámico o dar entrada a inversores en una compañía que factura cuatro veces menos que antes de la crisis económica.

La firma que preside Rosa Lladró y gobierna junto con su cuñado Juan Ignacio Jara y su hermana Ángeles Lladró pretende seguir adelante «con el proceso de reorganización» y para ello tiene previsto remodelar la dirección de la compañía dando entrada a profesionales externos. La mercantil mantendrá el plan de regulación temporal de empleo para el personal de fabricación para reducir sus existencias,. Además, pretende «modificar su estructura para acometer y adecuarse a las acciones que deben llevarse a cabo y permitan impulsar la estrategia internacional».

La dirección de la compañía desmintió, hace unos meses, que estuviese dispuesta a dar entrada a un inversor ajeno a las familias fundadoras, si bien se admitió que se estaban buscando fuentes alternativas de financiación. Lladró quiere reducir costes e invertir en nuevos proyectos. Exporta sus porcelanas a más de 120 países de los cinco continentes, siendo los principales mercados de exportación Estados Unidos, Japón, China e India.

Mientras tanto, acelera el proceso de concentración de sociedades y activos de la firma cerámica „incluida una valiosa colección de 70 obras de artes (trasladada recientemente a Madrid)„ en Sodigei. De hecho, Lladró S.A. repartió 45,2 millones en dividendos a sus socios con cargo a reservas y al ejercicio de 2015 para capitalizar la matriz.