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Parálisis y ajuste

El Sabadell dará créditos a promotores en 2016 al percibir el fin de la crisis del ladrillo

El banco inicia contactos con el sector al concluir el veto impuesto por Bruselas para dar financiación por la absorción de la CAM

El Sabadell dará créditos a promotores en 2016 al percibir el fin de la crisis del ladrillo

Quedan pocos días para el octavo aniversario de la quiebra bancaria que marcó el inicio de la crisis financiera y el pinchazo de la burbuja inmobiliaria. Aunque la desaceleración venía de meses atrás, el hundimiento un 16 de septiembre de Lehman Brothers como consecuencia de su exposición a las hipotecas subprime se considera el arranque de un cambio de ciclo del que todavía se sufren las consecuencias.

El sector inmobiliario se acerca a una década de parálisis y ajuste. Sin embargo, algo está empezando a moverse en el ladrillo en España y en la Comunitat Valenciana más allá de las operaciones de fondos de inversión sobre edificios o activos singulares y de alto valor. La concesión de hipotecas crece, la demanda embalsada comienza a moverse tras percibir que los precios han tocado fondo y la banca superviviente de la burbuja toma posiciones. La mejor de prueba de que esto es así son las llamadas que están comenzado a recibir empresarios promotores de parte del Banco de Sabadell, que se está ofreciendo para financiar operaciones ligadas al ladrillo a partir del año que viene.

En 2016 vence la prohibición marcada por Bruselas de liberación de crédito destinado a financiar operaciones inmobiliarias. Se trata de una limitación impuesta como consecuencia del proceso de absorción de la Caja Mediterráneo (CAM) en diciembre de 2011 tras una inyección de ayudas públicas de 5.249 millones de euros y un esquema de protección de activos que cubre parte de las pérdidas derivadas de las operaciones fallidas.

En teoría, en 2016 el Banco de Sabadell debería haber hecho gran parte de la digestión de los activos tóxicos heredados de la CAM, lo que le permitirá volver a jugar en el negocio de ladrillo. Y la entidad que preside Josep Oliu parece que tiene ganas. Los contactos se están produciendo o bien con grandes empresas promotoras con balances saneados o con pequeños empresarios que se salvaron de la quema del sector y tiene pequeños proyectos en cartera. Estos movimientos coinciden con la decisión de Solvia (la inmobiliaria participada por el banco) de reactivar una promoción en el PAI de Quatre Carreres de Valencia compuesta por 110 viviendas sobre suelo del Sabadell. La viabilidad de las operaciones pasa por detectar zonas con demanda de vivienda y con perfiles de compradores de poder adquisitivo medio-alto y que aporten de su bolsillo como mínimo entre el 20 % y el 30 % de valor de la compra.

Las áreas donde las promociones de obra nueva están comenzando se ubican principalmente en Valencia ciudad y en zonas de costa del sur de Alicante.

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