El Ibex 35 ha cerrado la sesión de este miércoles con un avance del 1,77%, lo que ha permitido al selectivo quedarse a las puertas de los 9.600 enteros (9.559,9) en línea con las principales plazas europeas.

Sin embargo, el balance del mes de septiembre ha sido negativo, ya que el índice ha recortado un 6,81% (siendo el peor septiembre desde 2002), una caída que se amplía al 11,23% si se tiene en cuenta el trimestre. China y la crisis de Volkswagen han sido fundamentalmente las causantes de esta situación.

En el mercado de deuda, la prima de riesgo se ha colocado en 131,1 puntos básicos, con la rentabilidad del bono a diez años en el 1,895%. Mientras, en el mercado de divisas, el euro se intercambiaba a 1,1157 dólares.

Gamesa se ha consolidado como el mejor valor del selectivo con un avance del 4,4%, seguido de OHL (+4,2%) y DIA (+4,1%). IAG, que ha repuntado un 3,6%, y Red Eléctrica (+3,5%) han completado los cinco primeros puestos del ranking de subidas.

Por su parte, Acerinox se ha erigido como el 'farolillo rojo' de la jornada con un retroceso del 1,1%, seguido de Abengoa (-1,07%), Bankia (-1,02%), Arcelormittal (-0,6%) y Mediaset (-0,4%).

Los 'blue chips' también se han apuntado al positivo, liderados por Inditex, que se ha revalorizado un 3,4%. Santander ha ganado un 1,7%, Repsol un 1,7%, Iberdrola un 1,4%, Telefónica un 1,2%, BBVA un 1,02% y Endesa un 0,9%.

Al igual que el Ibex, las principales bolsas europeas han conseguido avanzar gracias al apoyo de Wall Street y a la mejora del sector de los recursos básicos y del automovilístico.

"Estos tres vectores son los responsables de los fuertes impulsos rápidos y lineales que registran los índices europeos en los últimos días y que generan movimientos en ambas direcciones superiores al 1% en cuestión de minuto", ha señalado el estratega de mercados de IG Daniel Pingarrón.

El experto ha recordado que a lo largo de este trimestre -- el peor tercer trimestre desde 2011-- las bolsas occidentales han registrado caídas superiores al 10% en la mayoría de los casos debido a la volatilidad que se ha instalado en los mercados.

Incertidumbres sobre China

Las causas de esta evolución negativa se han encontrado, sobre todo, en los "temores" que ha proyectado la economía china a través del desplome de sus mercados, del empeoramiento de los datos macroeconómicos y de la "enorme batería" de medidas monetarias, fiscales, regulatorias y devaluatorias de sus autoridades.

"Las incertidumbres sobre China, además, han tenido muchas otras derivadas, que en su conjunto, han formado un cóctel muy bajista, con la mayor corrección de la tendencia alcista de las Bolsas que se recuerda", ha señalado Pingarrón.

Según ha señalado el experto, el desplome del petróleo y de las materia primas así como el de las divisas de países emergentes, la oleada de bajadas de tipos de interés en multitud de bancos centrales, el mantenimiento de los tipos en EE.UU. por parte de la Fed o el alargamiento potencial del QE en Europa "se explican exclusivamente por el temor a una fuerte ralentización del crecimiento chino, país que más ha contribuido al crecimiento mundial en los últimos años".

Otra de las causas que ha afectado al devenir de las bolsas ha sido la crisis de Volkswagen, que ha arrastrado consigo al sector automovilístico.

Por todo ello, el analista ha destacado que el último trimestre del año comenzará con unas Bolsas que han experimentado una fuerte corrección que incluso ha llevado a comprometer el sentido de la tendencia de fondo.

Sin embargo, ha advertido que "la elevada liquidez y la lógica de los inversores desde el 2009", podría deparar un fuerte rebote en el último trimestre del año "en la medida en la que no se confirme el escenario negativo que descuentan los precios en estos niveles respecto a los factores que les han llevado a caer con fuerza en los últimos meses".