El secretario general de la Confederación de Empresarios de Castelló (CEC), Rafael Montero, junto a otros tres imputados, declaró ayer ante el juzgado de Instrucción número 3 de Nules por las supuestas irregularidades en la gestión de ayudas para cursos de formación. La declaración de Montero se prolongó durante media hora y a su salida declanó hacer declaraciones a los medios de comunicación. Además de Montero, declararon en calidad de imputados el responsable de formación de la CEC, José Antonio Espejo, y dos empresarias que se acogieron a su derecho a no declarar.