La economía valenciana va como un tiro. Si el lunes fue la Fundación de las Cajas de Ahorros la que auguraba un crecimiento del 3,4 % para este año, ayer fue el BBVA Research el que dobló la apuesta con un pronóstico de subida del PIB para 2015 del 3,5 %. El servicio de estudios de la entidad financiera prevé un aumento más moderado para el próximo ejercicio, concretamente, del 2,6 %. Pero el crecimiento valenciano será en 2015 tres décimas superior al de España y se situará por encima de la media mundial „medio punto„ por primera vez desde 2001.

La buena marcha de ambos años permitirá a la Comunitat Valenciana crear 140.000 puestos de trabajo, con lo que la tasa de paro en 2016 bajará al 19 %. De esta forma, la autonomía generará en dos ejercicios la mitad del empleo destruido durante la crisis. Es un dato positivo, pero «queda mucho para llegar al nivel de 2007», según aseguró ayer el economista jefe de Economías Desarrolladas de BBVA Research, Rafael Doménech, durante la presentación de un informe trimestral sobre coyuntura económica valenciana.

El aumento del PIB viene impulsado por el crecimiento «notable» del sector industrial, el aumento del consumo privado y la inversión y el cambio hacía una política fiscal más expansiva en España. Sin embargo, los factores externos han tenido una influencia crucial en esta dinámica. Así, la caída del precio del petróleo aporta un punto al PIB valenciano y el tipo de cambio del euro genera un aumento de cuatro décimas, mientras que para 2016 el BBVA calcula que la mejora de la situación europea conllevará otras cuatro décimas.

Sin embargo, esos condicionantes procedentes del exterior, como la apatía en los países emergentes o la volatilidad en los mercados, aportan ciertas sombras que la entidad ya está percibiendo, dado que los datos que «se van conociendo del tercer trimestre» de 2015 «adelantan una ligera desaceleración» de la economía valenciana. Si en el primer tramo del año el crecimiento anualizado era del 4 %, para entre julio y septiembre se augura una horquilla de entre el 3,2 % y el 3,6 %. La entidad financiera considera que, para tratar de minimizar el impacto que tendrán los acontecimientos del extranjero, la Generalitat «debe afianzar la sostenibilidad de sus cuentas públicas y acometer diversas reformas que sigan impulsando la creación de empleo». Preguntado cuáles, Doménech explicó que algunas dependen de la coordinación con el Gobierno central, entre ellas la resolución de la infrafinanciación autonómica y el exceso de deuda. Otras, propias de la Comunitat Valenciana, están relacionadas con la sanidad, la educación, la simplificación administrativa o la toma de medidas que eleven el tamaño de las empresas.

Déficit

Respecto al sector público, aunque BBVA ve improbable que la Generalitat cumpla los objetivos de déficit para 2015, el economista jefe de la entidad aseguró que el ajuste del gasto «ya se ha completado», por lo que el déficit se explica en su mayor parte por «la caída de ingresos». «Lo que necesitamos es que la recuperación económica aumente las bases imponibles y que sea la mayor actividad la que permita generar más ingresos a las administraciones públicas», concluyó.