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Análisis

¿Y si desaparece la patronal alicantina?

Cierval carece de un plan B ante la eventual liquidación de Coepa

¿Y si desaparece la patronal alicantina?

¿Es factible que la patronal alicantina Coepa acabe desapareciendo por liquidación? Diversas fuentes empresariales contestan que sí, que es posible. Motivos para llegar a una situación tan extrema los hay de sobra. No sería la primera vez que una organización provincial integrada en la CEOE acaba tan mal. En 2013, ya le sucedió a la de Ciudad Real por una deuda de 2,4 millones. La Coepa está mucho peor. La Generalitat va a pedir a los tribunales el embargo de los bienes de la organización por una deuda de 3 millones „más los intereses„ contraída con el Instituto Valenciano de Finanzas en 2010 para construir un centro de prevención de riesgos laborales sobre una parcela cedida por el ayuntamiento de la ciudad. Los dirigentes de Coepa confían en una negociación que les salve in extremis, pero no es nada fácil.

Por un lado, porque el ayuntamiento ha iniciado los trámites para recuperar el suelo y, por tanto, el inmueble y ello implica serias dificultades para la dación en pago de la deuda. Además, el presidente de la Cepyme alicantina, Cristóbal Navarro, enfrentado a la cúpula de Coepa, ha judicializado el conflicto del préstamo al presentar una querella contra el IVF por no exigir el dinero. Por si fuera poco, la patronal provincial del metal Fempa ha iniciado los trámites judiciales para presentar una denuncia por supuestas irregularidades en las cuentas de 2009 de Coepa.

Así que el panorama es más que negro. ¿Qué sucedería si Coepa desapareciera? ¿Cómo se cubriría su hueco? ¿Cómo influye su situación en la patronal autonómica Cierval, que prepara una reforma interna y a la que la provincial alicantina hace tiempo que no abona sus cuotas por sus dificultades financieras?

Fuentes de Cierval, siguiendo las consignas que les trasladan sus socios alicantinos, aseguran que no contemplan la liquidación de Coepa y se muestran convencidas de que habrá un acuerdo con la Generalitat que solucione el problema. Otras fuentes empresariales de Valencia confían en que el conflicto se resolverá, pero no ponen la mano en el fuego y apuntan que Cierval debería disponer de lo que en estos momentos carece, es decir, un plan B por si se da esa eventualidad.

Incógnita

Y es que en verdad no existe, entre las fuentes consultadas, una idea clara de qué sucedería. Por una parte está por dilucidar qué pasaría con la deuda y si los actuales dirigentes de Coepa podrían montar una nueva organización que no la heredase. Una opción podría ser que la Asociación de la Empresa Familiar de Alicante, cuyo principal dirigente, Francisco Gómez, es vicepresidente de Coepa, aglutinara a ese entramado empresarial. También se expone la posibilidad de que Cierval asuma directamente la representación del empresariado alicantino o de que monte una delegación en la zona.

Cristóbal Navarro, que pretende alumbrar una nueva patronal autonómica, aseguró a este diario que la Generalitat no puede llegar a una «componenda con la Coepa» y añadió que los mismos socios de la actual provincial no podrían fundar otra organización «porque recibirían la deuda por continuidad en la responsabilidad». Así que el presidente de Cepyme apuesta por que Cierval acabaría montando una delegación «para fortalecerse».

Pero también algunas fuentes consultadas opinan que una circunstancia como la citada (aunque no se llegue a la liquidación), a la que habría que añadir las penalidades que atraviesa la provincial de Castelló CEC „investigada por un caso de irregularidades en la formación por medio millón de euros„, podrían servir para refundar Cierval y convertirla en una organización autonómica con todas las de la ley, es decir, sin la dependencia actual de las tres provinciales que la fundaron. Otros dirigentes consultados no van tan allá y apuntan que la ocasión sí podría dar pie a una de las propuestas para la reforma de Cierval que Castelló y Alicante ven con peores ojos, a saber, la incorporación directa de organizaciones sectoriales. Esta misma fuente apunta otra opción: que las penurias de Coepa la aboquen a una mayor colaboración con la CEV de Valencia bajo el paraguas de Cierval, lo que implicaría que algunos de los gastos de Coepa los cubriera la CEV a través de los servicios que esta presta.

Son ideas que pueden ponerse encima de la mesa ahora que, aprobada la ley de participación institucional que regará todos los años con 2,6 millones las arcas de la Cierval, la patronal autonómica tiene expedito el camino para empezar a pensar en su reforma, aplazada hasta que el citado texto entrara en vigor.

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