Convencidos de haber «tocado fondo» y haber dejado atrás una situación «absolutamente desastrosa», Amper afronta el futuro con «unas cuentas saneadas" y unas previsiones "prudentes" de recuperación de la facturación, en palabras de su presidente, Jaime Espinosa de los Monteros. La compañía tecnológica acaba de salir del preconcurso de acreedores en el que estaba inmersa desde diciembre de 2014 después de que el juzgado de lo mercantil número 5 de Madrid homologase el acuerdo de refinanciación que alcanzó con la banca acreedora, que prevé la capitalización de la mayor parte de su deuda.

«La deuda ya está capitalizada», afirma Espinosa de los Monteros, que ya ha llegado a un acuerdo con Veremonte, el vehículo inversor del empresario Enrique Bañuelos, para cerrar la compra del paquete de acciones que tenía en Amper, que según la CNMV era del 2,37% a 5 de junio de 2014.