Los nuevos dirigentes de la Conselleria de Economía consiguieron ayer un hito reseñable: poner de acuerdo al sector del comercio. Grandes operadores, pequeños comerciantes, supermercados, consumidores y sindicatos se pusieron de acuerdo a la hora de señalar los diez días festivos de apertura permitida para el próximo 2016. Casi por unanimidad, con la excepción de los sindicatos, que se abstuvieron sin oponerse.

Se abrirá los domingos 3 y 10 de enero; el domingo 20 de marzo, después de Fallas; el Jueves Santo 24 de marzo; el Domingo de Resurección (27 de marzo) y el Lunes de Pascua (28 de marzo). También se podrá abrir el 15 de agosto, y, para la campaña de Navidad, los domingos 4, 11 y 18 de diciembre y el día de la Asunción, jueves 8.

Así se pactó en la reunión celebrada en la Lonja de Valencia, lugar emblemático y escogido por la dirección general de Comercio por su valor simbólico. En torno a ella se pretende situar la única zona de gran afluencia turística de la capital, que sustituirá a las cinco actualmente existentes.

En el acuerdo alcanzado ayer todos cedieron. La Conselleria de Economía, con Rafael Climent a la cabeza, llegó al Observatorio con una propuesta elaborada a partir de una lectura estricta del decreto de horarios comerciales, elaborado a principios de año por el Consell de PP (Máximo Buch) y que en la práctica solo permitía abrir un domingo de diciembre.

Y es que el decreto Buch (que se aplicaba por primera vez para fijar los festivos en 2016) establece un orden de criterios que relega a último lugar la campaña de Navidad, y sitúa por delante criterios como abrir un día cuando haya dos festivos continuados; los periodos de rebajas y los festivos de mayor afluencia.

La propuesta fue vista como «una barbaridad» por las grandes superficies, pero tampoco entusiasmaba a los sindicatos. Y es que esa propuesta de la conselleria incorporaba prácticamente todos los festivos y domingos del mes de agosto como de apertura permitida. En ese contexto y tras dos recesos, los representantes del comercio se pusieron de acuerdo „«el planteamiento inicial era infumable», apuntaron desde Anged„. La conselleria, les indicó, aceptaría cualquier decisión a la que llegaran por consenso. Si no, impondría la suya.

La solución, finalmente, satisface moderadamente a todos. La conselleria consigue reducir, aunque mínimamente, los cinco festivos que se abre la Navidad de 2015. Se habilitan cuatro de los seis posibles para 2016, y se respeta como festivo de persiana bajada el segon dia de Nadal (Sant Esteve), que desde hace años estaba permitido, así como el 6 de diciembre. Otra fecha simbólica en que no se abrirá es el 19 de marzo, un gesto para «la conciliación de los trabajadores, una propuesta que ha sido comprendida y aceptada por el resto de miembros del Observatorio», dijo el conseller Climent.