Dos centenares de empresarios de la Comunitat Valenciana y Madrid —junto con algunas personalidades políticas— se darán cita mañana en la capital de España para participar en la gala anual que organiza la fundación Conexus, entidad que desde 2010 busca potenciar las relaciones empresariales entre ambas autonomías. La cita tendrá lugar a partir de las 21 horas en el real casino de Madrid y en ella se librará el segundo premio Conexus, que en su primera edición recayó en Ford España. Desde la entidad comentaron que «nuestra intención siempre ha sido la de crear lazos entre los tejidos empresariales de ambas regiones, somos un foro permanente de reflexión sobre las necesidades valencianas emplazado en Madrid».
Participantes
José Ignacio Goirigolzarri, actual presidente de Bankia, José Vicente Morata, presidente de la Cámara de Comercio de Valencia y Salvador Navarro, presidente de la Confederación Empresarial Valenciana (CEV), son algunos de los representantes que participarán en la gala de este año. La Fundación Conexus comenzó a operar en abril del año 2010 y durante sus seis años de existencia ha organizado distintos encuentros con personalidades políticas y empresariales.
Los ministros de Economía y Justicia, Luis de Guindos y Rafael Catalá, el actual presidente de la Generalitat, Ximo Puig, su antecesor en el cargo, Alberto Fabra o el titular de Asuntos Exteriores, Javier García Margallo, han sido algunas de las personalidades que han participado en los eventos organizados por la organización en los últimos tres años.
La fundación ejerce como lobby valenciano desde su sede de Madrid. La «invisibilidad» de los problemas autonómicos en la capital se ha convertido en un caballo de batalla y denuncia constante durante los últimos años.
La infrafinanciación autonómica y la falta de infraestructuras son dos de los ejes de un discurso abanderado muchas veces, sobretodo en época de elecciones.
Sin embargo, luego la realidad parece ser otra. Como muestra un botón: el Congreso estuvo semivacío en el último encuentro sobre la admisión a trámite de la reforma del Estatuto de Autonomía de la Comunitat Valenciana. Para la posteridad quedará la imagen de Mariano Rajoy en el bar mientras tenía lugar el debate.
