El proyecto de la Conselleria de Economía Sostenible de dar a la Cámara de Alcoi la competencia territorial sobre la comarca de la Vall d'Albaida en detrimento de la corporación de Valencia no tiene el camino expedito. El presidente de la junta de base de la patronal del textil Ateval en esa comarca, Càndid Penalba, aseguró ayer a este diario que el apoyo a la iniciativa que expresó el pasado domingo no es incondicional, porque el cambio solo será aceptado por el sector siempre y cuando la entidad alcoyana pueda prestar los mismos servicios que en estos momentos está ofreciendo la valenciana. «El factor de la proximidad es positivo, pero no compensaría si Alcoi no dispone de la misma fortaleza que Valencia», afirmó.

Penalba explicó que, en estos momentos, la Cámara de Valencia ofrece «más servicios y más formación» que la de Alcoi y destacó el convenio que Ateval tiene suscrito con esta corporación que le permite realizar certificaciones de exportación desde las oficinas de la patronal textil en Ontinyent. «Si perdemos ese servicio, saldremos perjudicados», precisó antes de recordar que, si el departamento del Consell dirigido por Rafael Climent, natural de Muro de Alcoi, les propone el mencionado cambio, «tendremos que valorar si Alcoi es tan potente como Valencia».

Además de que la delegación de la patronal autonómica del textil Ateval en la Vall d'Albaida no parece dispuesta a firmar un cheque en blanco en esta cuestión, la Conselleria de Economía tendrá que lidiar con la división empresarial en la comarca. Y es que el pasado octubre la territorial del textil en la zona acordó su salida de la multisectorial Coeval, con lo que la representación de los patronos ha quedado dividida en dos, si bien la ruptura, según Penalba, se ha producido en términos amistosos. La decisión deja tocada a Coeval, dado que Ateval tiene más afiliados que ella en la comarca, no en vano el textil es la principal actividad industrial de la zona.

La separación se produjo tras la llegada en junio de Penalba a la presidencia de la junta de base de Ateval en la Vall d'Albaida y obedece a las deudas que esta tenía con Coeval por el impago de cuotas. El acuerdo implica que Ateval abonará la deuda acumulada durante la etapa de la crisis en los próximos años pero seguirá su camino de forma independiente. Climent tendrá ahora dos interlocutores.