La EPA ofrece, sin ningún genero de dudas, datos que son positivos tanto desde el punto de vista cuantitativo como cualitativo. Las cifras son contundentes: en 2015 se crearon 525.100 empleos, el número de parados se redujo en 678.200 personas y la tasa de paro disminuyó en 2,81 puntos situándose en lo 20,9% de la población activa. El año 2015 ha sido un buen año para el mercado de trabajo no solo porque supuesto el mayor descenso del paro de la serie histórica de la EPA, sino también porque supone una mejora de las cifras de un buen año como 2014 y ello significa que se encadenan dos años consecutivos de mejora que reafirman una tendencia muy positiva. Los datos para la Comunitat Valenciana también dan razones para el optimismo pues se caracterizan por un notable aumento de la ocupación (50.200 ocupados mas), un significativo descenso del paro (49.000 parados menos) y una tasa de paro del 21,45 % (2 puntos menos que en 2014).

Además de esta indudable mejora cuantitativa también hay mejoras cualitativas de determinados aspectos negativos que caracterizan a nuestro mercado de trabajo: alta tasa de desempleo juvenil, gran temporalidad en el empleo, elevado número de parados de larga duración y de hogares con todos los miembros en paro y un elevado grado de desaprovechamiento por parte del mercado de trabajo de los individuos con mayor nivel de formación.

Pues bien, aunque en 2015 la situación lejos de ser satisfactoria podamos seguir calificándola como de preocupante, no es menos cierto que los últimos datos confirman que se han experimentado mejoras en los cinco aspectos mencionados: tasa de paro juvenil, temporalidad, desempleo de larga duración, hogares con todos los miembros en paro y un aumento de los ocupados universitarios.

En efecto, la tasa de paro entre los jóvenes menores de 25 años, aunque elevada (46,2%) descendió en 2015 en 5,56 puntos, un descenso mucho mas intenso que el descenso de 2,81 puntos experimentado por la tasa de paro general.

Aunque el mercado de trabajo español sigua teniendo una tasa de temporalidad del 25,66% y durante 2015 haya crecido en 1,4 puntos, es cierto que en el último trimestre del año hay signos de cambio de tendencia pues los contrato indefinidos aumentaron en 103.400, mientras que los temporales disminuyeron en 63.600.

Igualmente, aunque resulte preocupante que el 43,6 % de los parados lleven mas de dos años en paro (2.328.200 personas), su numero se ha reducido durante 2015 en 303.300 personas, lo que supone un 12,7% menos que en 2014. Similarmente, es cierto que en 2015 existen todavía 1.556.600 hogares con todos los miembros en paro, pero el signo positivo y ciertamente alentador es que su número se ha reducido un 11,9% durante 2015.

Finalmente, los datos de 2015 indican que la mayor parte del crecimiento de la ocupación ha sido mediante el aumento de ocupados con mayor nivel de formación. Así, en 2015 de los 525.100 ocupados mas en España, 183.100 son ocupados con nivel de estudios superiores (el 34,8 %) y en la Comunitat Valenciana de los 50.200 ocupados mas, 40.800 corresponden a ocupados en el mercado de trabajo con estudios superiores (el 81,3 %). Estos son buenos datos en cuanto que implican un mayor grado de aprovechamiento del capital humano disponible.

En definitiva, 2015 es un buen año para el mercado de trabajo tanto desde el punto de vista cuantitativo como en cuanto a que supone una ligera corrección de serios desequilibrios que esperemos que se consolide.