Las elecciones sindicales celebradas en los centros de trabajo de la Comunitat Valenciana durante 2015 han puesto en evidencia un nuevo retroceso en la representatividad de las centrales sindicales mayoritarias, CC OO y UGT-PV, si bien mantienen su hegemonía con el 73,4 % del total de delegados elegidos. Así las cosas, continúa la sangría de dirigentes en el mundo laboral al perder las organizaciones lideradas por Paco Molina y Gonzalo Pino un total de 2.419 personas, es decir un 11,2 % menos que los logrados un año antes.

Las razones de dicha disminución de sindicalistas en las empresas valencianas, agrupados a través de 95 organizaciones, en su mayoría sindicatos de ámbito empresarial —frente a las 71 del año anterior—, hay que buscarlas en los recortes de plantilla de las compañías, en los expedientes de regulación de empleo (ERE) o bien en el cierre de compañías. En conjunto, la Comunitat Valenciana aglutina 2.103 delegados menos en los órganos de representación de los trabajadores en la empresa y del personal al servicio de las Administraciones Públicas.

Las actas ya certificadas por la dirección general de Trabajo y Bienestar Laboral, contrariamente a lo que sucede en el ámbito privado, indican que los centros públicos valencianos cuentan con 2.463 funcionarios que son delegados, es decir casi 200 más que un año antes. En 2015 aumentaron las contrataciones de personal en los ayuntamientos, lo que explica esa subida.

CC OO vuelva a ganar

Comisiones Obreras ha vuelto a ganar los comicios y aventaja en algo más de 600 delegados el resultado obtenido con la Unión General de Trabajadores, que tan solo supera a la entidad son sede central en la plaza Nápoles y Sicilia en la provincia de Castelló. La merma de afiliación de ambas organizaciones también se refleja por tanto en el decreciente número de dirigentes en empresas.

Mientras tanto, CSIF consolida su tercer puesto en el mapa sindical de la Comunitat Valenciana y aunque tan solo cuenta con un 3,7 % de cuota de mercado, la organización que preside Daniel Matoses dispone de 385 delegados en la función pública, frente a los 585 de UGT y los 550, de Comisiones Obreras. En ese ámbito, Intersindical es cuarta con 290 representantes en las juntas de personal de la Comunitat Valenciana.

El sindicato de la enseñanza FSIE, implantado sobre todo en el sector de centros concertados, pasa a ocupar el cuarto lugar en el global de delegados sindicales al aumentar 187 representantes en un año. El quinto es el Sindicato Independiente (SI) liderado por Fermín Palacios, que al igual que USOCV, controlado por Ismael Montero, pierden algunos delegados en comparación con 2014. Intersindical consigue crecer. La central anarcosindicalistas CGT-PV gana un dirigente y alcanza los 467 delegados globales.