La Asociación Valenciana de Empresas de la Energía (Avaesen) denunció ayer que ningún productor de energía solar ha regularizado su instalación a quince días de que acabe el plazo. Los afectados confían en que el nuevo Gobierno liquide el real decreto aprobado hace seis meses que grava la producción de energía solar en el conocido como «impuesto al sol». Los perjudicados se enfrentan a la imposición de multas, pero están convencidos de que el Consell (que es el que tiene la competencia sancionadora) no actuará contra ellos porque rechaza el decreto impulsado por el Ejecutivo de Mariano Rajoy.
Avaesen incidió en que en los seis meses que lleva aprobado el decreto de autoconsumo «solo siete instalaciones en toda España se han inscrito en el registro obligatorio». Marcos J. Lacruz, presidente de Avaesen, explicó que en Valencia al menos ochenta productores están obligados a inscribirse en el registro. La inscripción conlleva el pago de una tasa.
«A pesar e que el registro en la página del Ministerio de Industria funciona, la adaptación autonómica es compleja por la propia indefinición del real decreto. No están suficientemente claros los procedimientos de las compañías distribuidoras para regularizar las instalaciones. Esto ha provocado el rechazo del sector, que no ve útil inscribirse en ese registro», apuntaron desde Avaesen.
El colectivo incide en que aunque el real decreto prevé sanciones para las personas que no regularicen sus instalaciones, «es complicado que las autonomías actúen porque ni los distribuidores de energía eléctrica se ponen de acuerdo para homogeneizar los requisitos que piden a los productores en régimen de autoconsumo».
«Contra la lógica del mercado»
Marcos J. Lacruz subrayó que tras seis meses «la realidad ha demostrado que el real decreto está concebido para desincentivar el autoconsumo. Va en contra de la lógica del mercado, y de la sostenibilidad del sistema eléctrico y del medio ambiente».
La política de la Generalitat Valenciana es diametralmente opuesta a la del Gobierno. La Conselleria de Economía Sostenible está negociando con la de Hacienda la introducción de deducciones fiscales en el IRPF de 2017 para impulsar el autoconsumo eléctrico entre los particulares. El Consell también va a aprobar este año una línea de financiación blanda de 2,4 millones de euros dirigida a fomentar el autoconsumo energético de la industria.
Además, el Consell va a interpone un recurso contra el real decreto que grava el autoconsumo de la energía solar. El Supremo ya admitió en febrero la primera demanda colectiva presentada por doce organizaciones contra el decreto. Los demandantes advirtieron de que la normativa española sobre autoconsumo «además de ser la más restrictiva del mundo, es ilegal».
Ahorro del 50 %
La instalación de un sistema que combine las placas solares con la conexión a la red eléctrica puede suponer un ahorro del 50% en el recibo de la luz. Este tipo de redes han incrementado su eficiencia en los últimos años. Los avances en I+D+i han permitido reducir los costes de la energía fotovoltaica un 85% desde 2007.
En la Comunitat Valenciana hay trescientas empresas especializadas en energía solar que dan trabajo a 6.500 personas. La industria llegó a estar contra las cuerdas el año pasado por el recorte de las ayudas del Gobierno.
