El debate de la tasa turística incomoda al Consell y escenifica de algún modo la disparidad de criterios entre PSPV, que contemporiza con los empresarios, y Compromís, partidario de la tasa, como ha dicho en alguna ocasión la número dos de Hacienda, Clara Ferrando. Ximo Puig pidió ayer aplazar el debate hasta que esté el documento de los expertos e insistió en que «hoy por hoy» no hay nada previsto. El conseller Soler señaló que lo que se haga será «con el diálogo de todos los sectores»: no hay «ninguna predisposición ni a favor ni en contra», dijo. Por su parte, el principal interlocutor con el sector y director de Turismo, Francesc Colomer, mantuvo el discurso socialista: «Ni la veo ni la contemplo. Otra cosa es que Hacienda lo explore como hipótesis de trabajo».