El exministro de Defensa y actual embajador de España en Reino Unido, Federico Trillo, cobró dinero de Ausbanc por clausurar unas jornadas organizadas por la asociación de Luis Pineda celebradas en el hotel Hilton de Barcelona el 26 de noviembre de 2010, según informa hoy el digital Vozpópuli..

El político del Partido Popular indicó el martes al citado diario que no recordaba bien qué cantidad percibió, pero que en todo caso fue "poca". "Quién iba a pensar entonces lo que está pasando ahora", comentó Trillo en una conversación telefónica mantenida con Vozpópuli. "En esas mismas jornadas había jueces y gente respetada del ámbito jurídico", señaló, y recordó que cuando se celebró ese acto estaba al frente de la coordinación de asuntos jurídicos e interior del PP, por lo que le pareció una jornada acorde a su posición. Cuando el diario le indicó que algunos jueces habían admitido cobros de entre 800 y 1.000 euros por participar en foros de Ausbanc, Trillo apuntó que le parecía "demasiada cantidad".

Federico Trillo fue el encargado de clausurar el III Foro de la Justicia de Ausbanc. Según recogieron las publicaciones de la asociación sobre las jornadas, el exministro de Defensa con José María Aznar manifestó entonces que desde que la Constitución reconoce los derechos de los consumidores, "estos han dejado de ser sujetos pasivos, para convertirse en activos, en titulares de derechos y deberes". Además destacó que organizaciones como Ausbanc permiten la defensa de los intereses colectivos: "Ausbanc es la respuesta social", dijo.

La asociación presidida por Luis Pineda, en prisión desde el pasado 18 de abril, está siendo investigada por supuestas extorsiones realizadas a bancos y empresas. Federico Trillo (Cartagena, 1952) fue nombrado embajador de España en Reino Unido en marzo de 2012. En 2010, cuando participó en las jornadas de Ausbanc, era Diputado por Alicante. Con anterioridad fue Ministro de Defensa (entre el año 2000 y 2004) y presidente del Congreso de los Diputados (desde 1996 hasta abril de 2000). El PSOE instó el pasado año al Gobierno a que destituyera a Trillo como embajador tras conocerse que siendo diputado mantuvo relaciones profesionales remuneradas con una empresa beneficiada por contratos en Castilla y León.