Ford y el sindicato mayoritario UGT sellaron ayer el pacto para evitar los 430 despidos que la empresa había puesto sobre la mesa por la necesidad de reducir la producción en 12.900 vehículos este año. La clave pasa por acortar la actividad diaria en dos horas, entre el 29 de agosto y el 22 de diciembre, ambos incluidos. Las dos horas de reducción se aplicarán de forma rotatoria en los turnos de tarde y noche.

La empresa no recortará el salario por esas horas de menos. E incrementará el gasto al duplicar los costes de transporte, con un servicio de autobuses adicional para el turno reducido. La plantilla, por su parte, devolverá esas horas en 2017 trabajando hasta seis sábados (gratis y obligatorios), en función de lo que exija la la producción.

Con este acuerdo, la plantilla logra una tregua hasta fin de año, pese al malestar al conocer ayer los cuantiosos beneficios de la compañía. Se salvan los 430 empleos en riesgo, que pasan a fijos. Además, tal como estaba previsto, otros 170 puestos de trabajo se consolidarán los próximos meses. Tras un primer semestre de incertidumbre y reajuste de la producción, el balance negativo son los 160 eventuales que no serán renovados y terminan este julio.

2017: nuevo frente de 1.167 empleos

En septiembre se creará una comisión para seguir «las expectativas que se vayan conociendo en cuanto a la situación de producción y ventas previsible para 2017». No todos están conformes con el pacto. Según CGT, el empleo más allá del 31 de diciembre «dependerá de la evolución de los mercados», según traslada la empresa.

Son unos 1.167 los eventuales cuyo contrato concluye el 31 de diciembre aunque lo normal es que, si no todos, la gran mayoría renueve. También queda para la vuelta de septiembre la situación de la planta de motores, cuya necesidad de reducir la producción no es tan alta.