OHL se desplomó un 24% en la sesión de Bolsa de ayer, con la que encadena cinco jornadas consecutivas de abultadas bajadas, en las que se ha dejado un 42,3%, coincidiendo con la publicación el pasado viernes de sus resultados semestrales y una rebaja ayer de la calificación por parte de Moody's. La constructora controlada por el Grupo Villar Mir volvió a marcar así en un nuevo mínimo histórico de cotización, al cerrar la sesión en 2,109 euros por acción.

En lo que va de año, el grupo acumula una pérdida del 60%, de forma que actualmente tiene un valor de mercado de 630 millones de euros, menos de la mitad del que presentaba a cierre de 2015.

OHL registró esta nueva caída en Bolsa después de que la agencia de calificación Moody's informara de que ha rebajado la nota de la compañía hasta situarla al borde de lo que se considera 'bono basura'.

La firma de rating atribuyó su decisión a los resultados semestrales que OHL presentó el pasado viernes, que arrojaron una reducción del beneficio del 94%, derivada fundamentalmente por los problemas surgidos en distintos proyectos internacionales del grupo.

En su informe, Moody's señala expresamente a la «nueva reducción» de los ingresos de construcción de la compañía que, según indica, provoca tensiones en la relación entre su beneficio bruto de explotación (Ebitda) con recurso (103 millones de euros) y la deuda bruta con recurso que soporta (1.430 millones de euros).