La patronal hotelera Hosbec ha atribuido de nuevo la caída de un punto de la ocupación en la segunda quincena de agosto a la fuga al alojamiento ilegal.

En este período, el índice de ocupación en Benidorm ha sido del 93,3 por ciento mientras que en todo el mes fue del 93,8, un dato que es el mejor desde 2007, pese a que las previsiones iniciales «se acercaban más al 96». La patronal ha cifrado en unas 40.000 plazas «las que podrían estar comercializándose de forma irregular» a través de plataformas de distribución de estos alojamientos, lo que supondría «estar duplicando directamente la oferta disponible».

A juicio de Toni Mayor, presidente de Hosbec, «se vulneran todas las leyes de la oferta y la demanda». Mayor afirmó que «esto es realmente crecer para nada porque los ingresos por turista siguen cayendo en los últimos quince años».

Según Hosbec, la causa de que la ocupación no haya despegado se encuentra en el mercado nacional y portugués. Así, los españoles siguen a la baja en número de pernoctaciones hoteleras, con 522.000 en agosto, lo que representa un 10% menos que el año pasado.

Por el contrario, el mercado británico «sigue inmune a cualquier efecto "brexit" y sumó 440.000 pernoctaciones y un crecimiento del 20%, mientras que los holandeses lo hicieron un 8%». Mayor considera que las causas del descenso se encuentran «en la fuga de un segmento de clientes más sensibles al precio a la oferta de alojamiento en viviendas», formando así parte de «una economía sumergida que es necesario regular y controlar lo antes posible».