La economía valenciana sigue manteniendo su velocidad de crucero. En el segundo trimestre del año experimentó un crecimiento próximo al 1 %, es decir dos décimas por encima de la media española, según el último informe de coyuntura elaborado por la Confederación Empresarial Valenciana (CEV). Se trata del segundo trimestre consecutivo en que se producen idénticos resultados en los dos ámbitos geográficos.

Pese a esta buena evolución, la patronal reitera que «la elevada tasa de paro y los menores niveles de renta disponible retrasan la percepción de la salida definitiva de la crisis».

El documento de coyuntura de la patronal valenciana añade que, durante un trimestre más, «el dinamismo de las empresas valencianas en los mercados exteriores sustentó gran parte de la actividad de nuestra economía real. En paralelo a esto, el principal componente de la demanda interna privada —el consumo de los hogares— mantuvo su mejoría» y la inversión privada acentuó su dinamismo, sobre todo en bienes de equipo. No todo fueron buenas noticias, dado que en el ámbito público «destacó la ausencia en la inversión, que siguió penetrando en terreno contractivo, así como un consumo público menor».

Además, las expectativas sobre el consumo de los hogares y la inversión empresarial son positivas, «aunque se vislumbra una tendencia a la ralentización». A este respecto, el informe recuerda que el Bréxit tendrá a medio plazo «repercusiones negativas» sobre el comercio exterior y el turismo por la relevancia en ambos del Reino Unido.

Por el lado de la oferta «se interrumpió el panorama sectorial, que hasta el primer trimestre era cada vez más homogéneo y sólido», asegura la CEV, cuyo comité ejecutivo se reunió el jueves. Los sectores primario y de la construcción «presentaron tasas de crecimiento trimestrales inferiores a las del trimestre anterior (incluso negativas), mientras que los sectores servicios e industrial avanzaron con mayor dinamismo. No obstante, en tasa anual todos los sectores continuaron en zona positiva».

Reformas estructurales

Por otro lado, el informe advierte de que «la incertidumbre política no está ayudando a fomentar la actividad económica ni a generar empleo». «Muchas inversiones privadas están a la espera de que se despeje la incertidumbre sobre la continuidad de las reformas estructurales», concluye.