Baleares, Cataluña y Comunitat Valenciana han hecho este martes un frente común para mejorar la Política Agraria Común (PAC) puesto que consideran «desatendidas» las necesidades específicas de los agricultores del Mediterráneo.
Según estas tres autonomías, la PAC negociada entre el Estado y Bruselas provoca situaciones de «desventaja competitiva», especialmente en las zonas de montaña y en las insulares. Por ello, las tres autonomías buscan sinergias en otros sectores, como la pesca y la alimentación, en reuniones paralelas en Barcelona y Valencia.
Palma ha sido este martes la sede del encuentro para debatir sobre el sector de la agroalimentación en la Eurorregión del Arco Mediterráneo (EURAM). Concretamente, en este primer encuentro de trabajo, se han tratado propuestas de mejora de la PAC, partiendo de la base de que consideran necesario replantear la PAC que ha negociado el Gobierno central con Bruselas.
En este sentido, dicen que la PAC no fue pensada para las principales producciones del arco mediterráneo y, aunque ha representado un papel positivo, no lo ha hecho en la medida de otros lugares, con lo que ha habido situaciones de desventaja competitiva, que en las zonas de montaña e insulares son más graves.
Las especificidades y conjunciones de las comunidades del EURAM las ha llevado a buscar sinergias y a abrir vías de colaboración y de presión hacia otros estamentos o instituciones, ya sea el Estado o la Unión Europea, ampliando las demandas propias a otros sectores productivos como la pesca, sobre la cual se debatirá el miércoles en Valencia, en un encuentro al que asistirá el director general de Pesca y Medio Marino, Joan Mercant.
Mientras, el director general, el de Agricultura y Ganadería, Mateu Ginard, ha sido este martes el responsable de inaugurar la jornada organizada por el Instituto Ignasi Villalonga d'Economia i Empresa, que se ha centrado en los frutos secos, los jóvenes agricultores, la ganadería y las zonas desfavorecidas y la insularidad.
Frutos sectos
En el ámbito de los frutos secos, las tres comunidades han incidido en que los campos de fruta seca están muy extendidos por todo el arco mediterráneo, y en el caso de Cataluña, Comunitat Valenciana y Baleares, los cultivos de almendros, algarrobos y avellanos definen paisajes característicos con una gran importancia territorial, ecológica y turística.
Este cultivo de secano tiene unos rendimientos bajos y está en retroceso. Al mismo tiempo, sin embargo, los cultivos de frutos secos permiten la obtención de rentas agrarias en espacios que no son aptos para otros cultivos a causa de las limitaciones hídricas y edáficas.
El esfuerzo del agricultor en estos espacios es muy elevado, pero fundamental para el mantenimiento de los espacios agrarios de secano de cultivos leñosos, que en el caso de Baleares representa la parte más importante de los cultivos leñosos (alrededor de 35.000 hectáreas). Estas superficies de cultivo generan pocos ingresos y reciben primas por superficie demasiado bajas por su importancia ecológica y paisajística.
Para todo eso, los representantes de la Generalitat de Catalunya, la Generalitat Valenciana y el Govern balear han concluido que los cultivos leñosos de secano --almendros, algarrobos y avellanos-- tendrían que recibir unas ayudas directas asociadas más altas. Se debería conseguir un notable incremento de la prima sobre todo en las zonas de secano.
Los asistentes a la reunión también han coincidido, por otra parte, en que el pago adicional para jóvenes agricultores es irrelevante, no cumple sus objetivos y no garantiza el acceso de los jóvenes a unos mínimos derechos de pagos básico.
Ganadería
Con respecto a la ganadería, las tres comunidades comparten que los problemas del ganado vacuno de leche, las dificultades del sector ovino y la crisis del porcino son aspectos que actualmente no encuentran respuestas adecuadas en la PAC. Por eso se ha propuesto llevar a cabo una reflexión sobre las ayudas asociadas y las medidas de desarrollo rural que sirvan para garantizar la viabilidad de las explotaciones ganaderas en el territorio.
La desigualdad entre unas explotaciones y otras, según la situación en el territorio, tiene que ser corregida por medidas eficaces que la PAC actual no garantiza, según las autonomías del EURAM.
En el caso de las Islas es necesario que se produzca un reconocimiento de los efectos de la insularidad, que haga referencia también a la doble y a la triple insularidad. Los gastos de producción son más elevados en lugares aislados, y Baleares sufren unos gastos más altos de transporte de abonos, forrajes y alimentación del ganado en general, que afectan sobre todo a los sectores ganaderos con un manejo más intensivo, como el ganado vacuno de leche o el porcino.
A la reunión han asistido, de Cataluña, Oriol Anson, director general de Desarrollo Rural de la Generalitat, y Joan Caball y Andreu Ferrer, coordinador nacional y técnico, respectivamente, de Unió de Pagesos de Catalunya; de Baleares, Mateu Ginard, los responsables del Fogaiba y Gabriel Torrens, secretario general de Unió de Pagesos de Mallorca, y de Valencia, Francisco Rodríguez, secretario autonómico de Agricultura y Desarrollo Rural y director de la Agencia Valenciana de Fomento y Garantía Agraria; Roger Llanes, director general de Agricultura Ganadería y Pesca; Antoni Lozano, jefe de gabinete de la Secretaría Autonómica de Agricultura y Desarrollo Rural, y Joanma Mesado, secretario técnico de la Unión de Labradores y Ganaderos de la Comunidad Valenciana.
También ha asistido el coordinador del Instituto Ignasi Villalonga d'Economia i Empresa, Rubén Pitarch, que ha sido el encargado de coordinar la jornada.
