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Cerámica

Porcelanosa pugna contra Bankia por recuperar los 517.000 euros que perdió en bolsa

La firma cerámica recurre ante la Audiencia de Castelló contra la sentencia de un juzgado de Vila-real que rechazó su demanda

Porcelanosa mantiene viva su batalla contra Bankia para tratar de recuperar el dinero que perdió en la salida a Bolsa de 2011 de la entidad cofundada por Bancaja. La firma cerámica confirmó ayer a este diario que ha presentado un recurso ante la Audiencia Provincial de Castelló contra la sentencia de un juzgado de Vila-real que desestimó su demanda inicial. Las acciones judiciales arrancan de las sentencias del pasado mes de enero del Tribunal Supremo que concluían que el folleto de la salida a Bolsa de Bankia incluía graves inexactitudes y, en consecuencia, anuló la compra de acciones por parte de los pequeños inversores, a los que la entidad presidida por José Ignacio Goirigolzarri se apresuró a devolverles todo el dinero.

El Supremo dejó expresamente fuera de sus resoluciones a los inversores institucionales, al entender que estos disponían de instrumentos suficientes para valorar los riesgos de la operación. Pese a todo, varios de ellos han decidido en los últimos meses recurrir a la vía judicial para recuperar su dinero. Es el caso de Iberdrola (que puso 55 millones), Juan Miguel Villar Mir (20), Demetrio Carceller, accionista de control de Damm (20) y Porcelanosa, que invirtió tres millones pero que, antes de la intervención de Bankia en mayo de 2012, logró vender parte de las acciones que tenía, hasta el punto de que la minusvalía se quedó en 517.000 euros. Esta es la cantidad que la empresa presidida por Manuel Colonques pretende recuperar ahora.

Así que presentó una demanda ante un juzgado de Vila-real en la que alegó que «suscribió las acciones en base a la información contenida en el folleto informativo, que no reflejaba la situación real de la entidad», tal como recogían las sentencias del Supremo. Además, añadió que «no es un inversor profesional ni institucional», sino una empresa «dedicada a la producción y comercialización de productos cerámicos».

Inversor profesional

No obstante, en su resolución del pasado julio, la jueza encargada del caso ha dado la vuelta a este último argumento y considera a la empresa castellonense un inversor profesional: «No existe duda alguna que la mercantil actora tiene dichas condiciones», apunta la sentencia. Lo hace al tener un activo superior a los 20 millones y superar sus recursos propios los dos millones. Para llegar a esta conclusión también fue clave la declaración de un empleado de Bankia, que reveló que no era la primera vez que Porcelanosa compraba acciones en una salida a bolsa y que fue «la propia demandante quien la solicitó [la adquisición de títulos del banco] sin que ningún empleado se la ofreciese».

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