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Concurso

El IVF se juega dos millones con la liquidación de la tecnológica Tissat

La firma la ha comprado la «startup» Walhalla que no asume el crédito de un inmueble de Castelló

El IVF se juega dos millones con la liquidación de la tecnológica Tissat

El Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) se juega dos millones de euros en la liquidación de la empresa Tecnología e Ingeniería de Sistemas y Servicios Avanzados de Telecomunicaciones (Tissat). La startup Walhalla ha comprado el 80 % de la compañía, pero no ha asumido una unidad productiva con un edificio en Castelló sobre el que pesa un crédito hipotecario de dos millones de euros. Los responsables del IVF confían en que la venta del edificio cuadre el desfase, pero otras fuentes cercanas al concurso aseguraron que es complicado que la Generalitat recupere el dinero.

La Generalitat Valenciana trató al final de la legislatura pasada de evitar el quebranto, pero no pudo cerrar la operación a tiempo. El objetivo era vender el 38 % que el Consell mantenía en Tissat antes de que la firma entrara en concurso de acreedores para que el crédito del IVF hubiera sido calificado como privilegiado. Sin embargo, Tissat entró antes en suspensión de pagos y la administración concursal calificó el crédito como subordinado por ser el IVF accionista de la propia mercantil. La consecuencia es que el IVF se debe poner a la cola junto al resto de acreedores para cobrar y los activos no cubren las deudas, según explicaron las mismas fuentes cercanas al proceso judicial.

Tissat entró en concurso de acreedores en mayo de 2015. La firma acumulaba en 2015 nueve millones de euros de deuda a largo plazo, de los que 4,3 millones de euros correspondían a entidades financieras. A los nueve millones de euros a largo plazo había que sumar 4,8 millones de euros de deuda a corto plazo y otros 7,3 millones derivados de los acreedores comerciales. En total, 21,1 millones de los que 12,1 correspondían al corto plazo. La firma arrastraba un volumen importante de deuda porque en 2011 invirtió 10 millones de euros en un centro de datos en Castelló.

Cambios accionariales

La presentación del concurso de acreedores se produjo un mes después de un cambio trascendental en el accionariado de la compañía. Manuel Escuin, director general de la firma, se hizo con el control del 62 % de la Tissat tras adquirir el 31 % que tenía Telefónica. Escuin mostró en ese momento su interés por comprar el 38 % de la Generalitat, pero en aquella ocasión el Consell descartó la oferta por considerarla baja.

La startup madrileña Walhalla, creada a finales de 2015 para ofrecer soluciones en la nube, ha adquirido ahora el ochenta por ciento de la compañía y el resto de unidades productivas que han quedado fuera del acuerdo van a liquidación. Entre los activos que ha adquirido Walahalla están sendos centros de datos en Castelló y Paterna de Tissat, que están considerados entre los mejores de Europa. Además, la firma madrileña compró diversas plataformas y centros tecnológicos.

El acuerdo de compra incluye la incorporación a Walhalla de un equipo especializado de 120 empleados de Tissat. La startup se ha quedado con el 88 % de la plantilla de Tissat. Un portavoz de la firma explicó que lo más les interesaba eran los equipos de ingenieros y las tecnologías de la compañía. «Tissat era un referente en el desarrollo de soluciones para la nube», añadió.

Walhalla va a fijar en Castelló su centro global de I+D+i para aprovechar el equipo que Tissat tenía en la Universitat Jaume I de Castelló. La compañía ha invertido en la operación cerca de diez millones de euros y tiene intención de invertir otros ocho millones antes de que acabe 2018.

Por otra parte, el titular del juzgado de lo Mercantil número dos de Valencia —Jacinto Talens— ya ha abierto la fase de liquidación de lo que queda de Tissat.

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