La Generalitat va a tener que volver a inyectar este año otros 27,1 millones de euros para enjuagar las pérdidas de la Ciudad de las Artes y las Ciencias (Cacsa). El año pasado ya tuvo que ampliar el capital en 40 millones de euros. El Consell se ve obligado a hacer prácticamente cada año una ampliación de capital para cuadrar el balance porque el complejo es deficitario a pesar de ser un gran polo de atracción del turismo.

Con la nueva operación, el dinero invertido por la Generalitat en ampliar capital social de Cacsa superará los 885 millones de euros desde 1999. Al margen, el dinero invertido en la obra por el Consell ha pasado de los 328 millones de euros en el proyecto inicial a más de 1.400 millones de euros.

En 1999, la Generalitat suscribió un convenio con la mercantil pública en el que la Administración valenciana se comprometía a garantizar el funcionamiento del complejo. Ese mismo año se llevó a cabo la primera ampliación de capital de 18 millones de euros. La iniciativa se sucedió ejercicio tras ejercicio entre 2004 y 2008 con inyecciones de capital que rondaban los cien millones de euros a través de acciones. En julio de 2010 el Consell autorizó una ampliación de capital social por valor de 73,6 millones de euros, el mismo importe que para el ejercicio 2011. En 2012 inyectó otros 42 millones de euros, en 2014 la cifra subió a 57,9 millones y el año pasado se quedó en 40 millones de euros. Actualmente el capital social de Cacsa es de 567 millones de euros.

Además, todos los edificios e infraestructuras de Cacsa han sufrido sobrecostes. L'Oceanogràfic costó 125 millones más de los 38,9 planteados en un principio y el Palau de les Arts casi cuatro veces más al pasar de 106,8 millones a 382.