La Fundación Bancaja prosigue con la expansión de su Monte de Piedad. Tras Alicante, en noviembre de 2015, y Castelló, en abril de este año, el turno le toca ahora a Murcia, donde abrirá delegación mañana. La entidad, cuyos orígenes se remontan a 1877, se ha convertido en el principal soporte financiero de la fundación heredera de la extinta caja de ahorros. Tan es así que su plan estratégico contempla como una de las vías de ingresos la expansión de su Montepío. De los 6,7 millones de euros de presupuesto de la fundación en 2015, el 45 %, es decir más de tres millones, provienen de la actividad de este organismo centrado en préstamos de una media de 700 euros por operación que tienen como prenda joyas. El año pasado, el Monte de Piedad formalizó 25.500 operaciones.

El otro motivo para la apertura en Murcia es que la Fundación ha detectado una importante demanda en esa autonomía, que carece de Monte de Piedad. Algo muy parecido sucedió con Castelló, que llevaba veinte años sin Montepío hasta que abrió el de Bancaja este año. Un total de 288 castellonenses se desplazaron en 2015 hasta Valencia para ejecutar en conjunto 600 operaciones. Según datos de la entidad, el 97 % de las joyas depositadas en el Monte de Piedad de la Fundación Bancaja son recuperados por los clientes sin llegarse a subastar. El Montepío da servicio actualmente a 12.000 clientes, administrando una cartera superior a los 25.700 créditos por un importe global de 17,2 millones de euros. El importe mínimo de las operaciones formalizadas asciende a 100 euros y el máximo, a 12.000 euros. El perfil del usuario es mayoritariamente femenino con un 70 % de mujeres en su base de clientes, y el 41 % tiene más de 65 años.

MIcrocréditos

Tras la apertura en Alicante, el gerente de la Fundación Bancaja, Antonio Vidal, remarcó que la entidad se ha marcado como objetivo competir en el mercado de los microcréditos, para ampliar su clientela. Vidal explicó que los tipos en el Montepío, en torno al 12 %, están por debajo del 21 % de los microcréditos y añadió que sus préstamos, además de atender a excluidos financieros, pueden servir ahora para financiar viajes o compras extras de Navidad.