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El IVIA sube un 17 % el gasto en personal tras una década sin renovar 95 vacantes

El instituto de investigación agraria eleva a 13,5 millones el presupuesto global pero cae la inversión

El IVIA sube un 17 % el gasto en personal tras una década sin renovar 95 vacantes

El Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA) contará en 2017 con un presupuesto total de 13.596.000 euros, lo que supone un incremento del 1,66 % en comparación con el de este año, según refleja el anteproyecto de cuentas de ingresos y gastos de la Generalitat. El organismo autónomo tutelado por la conselleria de Elena Cebrián elevará los gastos en personal a 7,43 millones de euros, es decir un 16,95 % más que en 2016 y representa el mayor aumento en las cuentas del IVIA. Durante la última década mantiene vacantes casi un centenar de plazas de investigadores en su plantilla.

La subida del gasto de este instituto agrario -referente en el ámbito mundial de la citricultura- permitirá reforzar diversas áreas de trabajo de la antidad cuya sede principal está en Moncada. Con todo, las inversiones reales caen a 4,1 millones de euros, un 12 % menos que en 2016. Respecto al personal, a mediados de 2015 -es decir, en vísperas del cambio político en la Generalitat- la administración autonomía todavía en manos del PP anunció la convocatoria extraordinaria, abreviada y urgente de 7 puestos interinos para investigadores. La decisión del organismo público dependiente de la Conselleria de Agricultura sorprendió porque la contratación de personal permanecía estancada desde 2008, último año con oferta pública de empleo. La plantilla fija se aproxima a los 240 empleados.

Esa falta de relevo generacional, la fuga de cerebros y los recortes presupuestarios en el IVIA durante los últimos años estaban dejando al centro sin referentes de primer nivel en el ámbito de la citricultura mundial. El instituto público ha pasado de un presupuesto de 22,6 millones durante 2008 a los citados 13,59 millones este ejercicio, lo que supone una disminución del 30 % respecto al inicio de la crisis.

En plena fase de reestructuración, el IVIA ha segregado de sus estructura el servicio de transferencia de tecnología (cuyo presupuesto supera los tres millones de euros). A partir de ahora dicho servicio se convertirá transversal de la conselleria para impulsar todas las políticas agrarias de esta administración pública.

Cambios en la estructura

El Gobierno valenciano anunció a principios de este año que cambiará la ley del Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias para adaptar su funcionamiento a las nuevas formas de gestionar la investigación que posibiliten buscar el equipo de profesionales más adecuado para cada proyecto. Según Cebrián, «el IVIA está más enfocado a la innovación y el servicio de transferencia de tecnología prestará servicios a todas las áreas de la conselleria».

La ley tiene más de quince años y necesita cambios para que el IVIA pueda buscar soluciones a los problemas del sector agrario, mediante una estructura dinámica y no estática . El instituto quiere recuperar investigadores para actuar con rapidez en el desarrollo de proyectos que aporten soluciones a los problemas.

La conselleria también pretende impulsar las estaciones experimentales de Agricultura, que entre otras tareas imparten formación, para acercarse más a las necesidades del sector en cada territorio de la Comunitat Valenciana.

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