Aunque la decisión no está tomada todavía, lo más probable es que Feria Valencia decida en breve presentar un recurso ante el Tribunal Supremo contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunitat Valenciana que anuló el ERE a 106 trabajadores aplicado por la institución en 2011. La entidad dice que esta sentencia no le deja claro qué debe hacer con los exempleados, singularmente con los 23 que denunciaron el expediente. Sin embargo, en Feria Valencia se temen que la respuesta no será rápida y, por ello, no sea que llegue demasiado tarde, prevén recurrir al Supremo antes de que termine el plazo.

Diga lo que diga el TSJ, el recurso al alto tribunal implica la paralización de la sentencia. Por tanto, si la respuesta del órgano judicial valenciano es la readmisión o la indemnización de los extrabajadores, cualquiera de estas medidas se demorará todo el tiempo que tarde el Supremo en contestar al recurso de casación de la feria.

Visto como va la Justicia en este país, es fácil que la institución no tenga que tomar una decisión definitiva hasta dentro de uno o dos años. Así las cosas, es tiempo suficiente para que Feria Valencia logre finalizar de una vez su proceso de reforma interno, que sigue a la espera de ese decreto del Consell por el que este asume la enorme deuda contraída por la institución por sus obras de ampliación, que están siendo investigadas en otro juzgado. Para entonces, la situación de la entidad puede ser diferente, sobre todo si consigue la entrada de un socio del sector que le aporte negocio añadido. Podría darse el caso de que necesitara ampliar plantilla. No parece la opción más viable a corto plazo, así que lo más probable es que la institución se viera en la necesidad de hacer otro ERE para despedir de nuevo a los exempleados si se viera legalmente obligada a readmitirlos. En ese caso los extrabajadores deberán valorar si les conviene regir su nuevo despido por la reforma laboral de 2012, menos benevolente en estos casos.

No estaría de más, de todas formas, que, como lo más probable es que el Supremo sancione lo dictaminado por el TSJ, que fundamenta su decisión en aspectos técnicos relacionados sobre todo con la actuación del entonces director general de Trabajo de la Generalitat, Román Ceballos, Feria Valencia empiece a examinar la situación personal de cada extrabajador, no sea que esté generando un daño innecesario. Un número significativo de ellos se prejubiló, pero es posible que muchos otros sigan en pos de un empleo y,seguramente, pasándolo mal. Con una sentencia del TSJ a su favor no debería ser así. Hay que buscar una solución.