Intersindical Valenciana arrancó ayer el V Congreso en el que pretende consolidarse como «un contrapoder» del nuevo Consell, que «compense cualquier veleidad que aleje su acción política de los intereses generales». Así se manifiesta el sindicato en la ponencia de Política Social que se debatirá y aprobará este fin de semana en Cullera, tres días de ideas y votaciones en las que se renovará su secretariado.

El acto de inauguración contó con la presencia del jefe del Consell, Ximo Puig, el presidente de las Corts, Enric Morera, el conseller de Economía, Rafa Climent, el alcalde de Cullera, Jordi Mayor, y representantes de Compromís (Joan Baldoví, Àgueda Micó) o Podemos (Antonio Montiel). Así como de sindicatos como UGT o CSIF.

El Congreso, que tiene como lema «Creixent», llega con el sindicato instalado en los 15.000 afiliados y con 556 delegados (82 más que en 2012). Es el 2,09% del total, pero es mayoritario en el ámbito educativo y crece en la Generalitat. Intersindical fue fundado en 2002 y se acerca a la mayoría de edad con el reto de adaptarse al nuevo escenario social, tras el cambio de gobierno y años de oposición al PP.

En esa nueva realidad, «Intersindical propondrá un gran acuerdo social y ciudadano entre las diferentes organizaciones sindicales, sociales y ciudadanos para que las propuestas de cambio no se frenen sino que adquieran un fuerte impulso que se concrete en un una multiplicidad de propuestas en defensa de los derechos y los intereses valencianos, comenzando por una financiación más justa».

En su ponencia, Intersindical alerta contra la desmovilización social. También contra la «amenaza» de que los sindicatos mayoritarios «recuperan determinadas prácticas patrimonialistas de representación social», y sobre todo contra el riesgo de sumisión al Consell de PSPV y Compromís. «En ningún caso se debe entender esta propuesta de acuerdo ciudadano como un instrumento para justificar o apoyar la acción política del Consell; más bien al contrario, como un contrapoder que compense cualquier veleidad que aleje su acción política de los intereses generales».

Los 132 delegados del sindicato debatirán hoy las ponencias sobre organización, la Carta Financiera, Política Sindical, Mujeres, Salud Laboral y pensiones. Sobre este tema, la ponencia propone a la organización implicarse en los movimientos sociales, «porque los recortes a las pensiones no son diferentes a los recortes en la sanidad, la educación, la dependencia o los salarios».