La antigua fábrica de Antiu Xixona es ya historia. La demolición de esta icónica factoría ubicada en el acceso norte al casco urbano de Xixona, junto al Pont d'Alcoi, ha terminado. Los trabajos se centran en el triturado de los escombros para su retirada, y dejar diáfano el solar de 3.700 metros cuadrados sobre el que se levantó hace casi un siglo está emblemática turronera bajo el nombre de Vicente Sanchis Mira. Sólo quedan pendientes dos pequeñas áreas por demoler. Una es el antiguo taller mecánico junto al puente. Y la otra está pendiente de que se tome una decisión sobre la caldera de 1962, ubicada junto a la chimenea industrial, que es el único elemento que estaba previsto conservarse de la fábrica. El ayuntamiento está estudiando si proteger y conservar la caldera como Bien de Relevancia Local (BRL), ya que forma parte de la chimenea y podría salvarse todo el conjunto como vestigio de la industria turronera de hace medio siglo.

Con esta demolición ha desaparecido uno de los últimos símbolos del sector turronero que quedan en el casco urbano, ya que en las últimas décadas las fábricas se han ido trasladando a los polígonos industriales buscando más espacio y mejores accesos. Esta factoría se levantó entre 1926 y 1928, con varias ampliaciones en los años 40, 50 y 60. En 1966 Sanchis Mira-Antiu Xixona se fusionó con el grupo La Fama, que había levantado en 1965 su factoría en el barrio Sagrada Familia, donde actualmente está la sede central de la turronera. Pese a esta fusión, con la que se constituyó una de las primeras empresas de Xixona entonces, y que se mantiene ahora, la producción de turrones se estuvo compaginando en las antiguas instalaciones de Sanchis Mira como en las nuevas de La Fama. A partir de 1976 se destinó a la fabricación de helados de Antiu Xixona, cerrando sus puertas en 1994 tras la crisis económica que azotó al sector entonces.