Las familias españolas y, por ende, las valencianas, son las europeas que menos perciben de sus entidades financieras por los depósitos a plazo. A fecha de agosto de 2016, el Banco Central Europeo fijaba los tipos de interés en el país para los particulares en el 0,17 %, justo por delante de los irlandeses, con un 0,14 %. La media de la eurozona está en el 0,54 %. La banca holandesa abona un 1,8 %. En el caso de las empresas, el porcentaje es muy similar, el 0,18 %, pero está dos centésimas por encima de la media. En un estudio publicado por la Fundación de las Cajas de Ahorros, el catedrático de Análisis Económico de la Universitat de València y director adjunto del IVIE, Joaquín Maudos, recuerda al respecto que el interés en los depósitos a plazo siempre se ha situado en España por debajo de la media europea.

El experto asegura que la intensa caída de los tipos en los mercados y la penalización que aplica desde junio de 2014 el BCE por el exceso de liquidez a los bancos explica que en la actualidad haya tres países en la eurozona que cobran a las empresas por los depósitos a plazo fijo: Bélgica, Países Bajos y Alemania.

Crédito a las empresas

En el otro lado de la balanza, la de los ingresos, el tipo de interés que aplica la banca española en las nuevas operaciones de crédito a las empresas es del 1,96 %, frente al 1,83 % de la eurozona. España se sitúa así en la zona baja, junto a Alemania (1,79 %) y Francia (1,54 %). En el caso de los préstamos para la compra de vivienda de las familias, el porcentaje es prácitamente idéntico „un 1,97 %„ y similar al 1,9 % de la media. En este caso, el coste también es superior al de Alemania (1,69 %) y Francia (1,72 %), aunque muy inferior al 3.17 % de Irlanda.