El patronato de la Fundación Bancaja aprobó ayer el presupuesto de 2017, que asciende a 6,3 millones de euros, importe que proviene principalmente de los ingresos aportados por la actividad del Monte de Piedad, así como de otros ingresos propios de la entidad heredera de la extinta caja de ahorros. La citada cantidad está ligeramente por debajo de la de 2016, cuando el presupuesto ascendió a 6,7 millones. La reducción es de un 1 %.
"Los presupuestos permitirán dar continuidad a la actividad social y cultural dirigida a todos los públicos que desarrolla la Fundación, así como potenciar la actividad de microcréditos sociales a través del Monte de Piedad", afirmó el presidente de la Fundación Bancaja, Rafael Alcón, en un comunicado.
La Fundación informó de que el plan de actuación para 2017 contempla el desarrollo de la programación en las dos áreas estratégicas de acción social y cultura, que responden a la misión de Fundación Bancaja. Esta es, recuerda, fomentar la integración social y la cohesión de la sociedad valenciana a través del uso social de la cultura, apoyando el desarrollo de las capacidades individuales y colectivas, y con especial incidencia en los colectivos más vulnerables.
Entre las acciones culturales destaca la producción de exposiciones temporales en la sede principal de Valencia, así como en las delegaciones de Sagunto y Segorbe. El plan de actuación contempla también "la planificación y realización de otras actividades culturales para la dinamización del centro cultural de Valencia".
En el área de acción social, una de las líneas principales de actuación se dirigirá al apoyo a las asociaciones sin ánimo de lucro de la Comunitat Valenciana a través de convocatorias de ayudas para proyectos que se dirijan a los colectivos de personas en riesgo de exclusión social y personas con discapacidad. La Fundación Bancaja ofrecerá talleres vinculados a sus exposiciones con una didáctica específica para cuatro colectivos: escolares, personas mayores, personas con discapacidad y personas en riesgo de exclusión social.
Junto con la labor social y cultural, la Fundación Bancaja continuará impulsando la actividad del Monte de Piedad en sus oficinas de Valencia, Alicante, Castelló y Murcia, que ofrecen una alternativa de microcrédito inmediato a personas excluidas del sistema tradicional de financiación con la aportación de joyas como única garantía.
Ayer también tomaron posesión de sus cargos como nuevos patronos Ana Lluch Hernández, María José Vañó Vañó y Juan Viña Ribes, así como la exministra de Cultura, Carmen Alborch Bataller, designada por la Conselleria de Hacienda.
