Una decena de pequeños empresarios han dejado en el aire la instalación de proyectos de gasolineras automatizadas, el nuevo modelo de negocio que ha irrumpido en el mercado de combustible. ¿El motivo? La incertidumbre legal que vive ahora mismo el sector con la negociación de una nueva normativa por parte de la Generalitat, que quiere imponer la obligatoriedad de que haya presencia física en todas las estaciones de servicio urbanas durante 16 horas al día.

Esta norma está siendo diseñada por la Dirección General de Comercio y Consumo, de la Conselleria de Economía, con el fin de garantizar la atención a las personas con discapacidad. Sin embargo, tras la negociación trasciende el enfrentamiento entre las empresas tradicionales y el nuevo modelo de negocio, con unos precios más bajos gracias a los menores gastos de personal.

En este contexto, y según la Asociación Empresarial de Estaciones de Servicio y Gasolineras Independientes de la C. Valenciana (Avegas), en torno a una decena de proyectos han quedado paralizados a la espera de la nueva regulación. «Hay empresarios que tienen la intención de poner en marcha un proyecto, pero el coste laboral es un factor importante. Puede ser la diferencia entre ganar y perder», explica Ignacio Pastor, presidente de Avegas.

Esta asociación de ámbito autonómico agrupa a pequeños y medianos empresarios. Son unas 30 gasolineras independientes que operan en el territorio. Estas gasolineras acarrean una inversión de entre 300.000 y 500.000 euros, sin contar el valor de los terrenos, que pueden disparar el proyecto. Y, según señala Ignacio Pastor, generan entre 2 y 2,5 puestos de trabajo de media.

Este modelo de negocio no está copado por pymes. También se han establecido con fuerza varias cadenas agrupadas en la asociación nacional Aesae, que está en guardia ante una norma autonómica a la que se opone frontalmente y también anuncia recursos incluso con reclamación de responsabilidad patrimonial.

Entre estos operadores destaca Ballenoil, con cerca de una veintena de gasolineras en la C. Valenciana: una en Alicante ciudad y otras 18 en la provincia de Valencia. También tiene previstas próximas aperturas en Elx y Almoines (Valencia). La cadena valenciana Gasexpress, por su parte, tiene una fuerte implantación en la Comunitat, con 20 gasolineras (seis en Alicante, diez en Valencia y 4 en Castelló). A ellas se suman una decena de la firma Petroprix, y presencia de otras dos cadenas con una estación, Autonet y Bonarea. Se estima en un centenar el número de gasolineras automatizadas en la C. Valenciana.

Frente al debate de fondo, la asistencia a las personas con discapacidad, desde la patronal de pequeños empresarios (Avegas), señalan que «los derechos de todos los consumidores se respetan». «En todas las gasolineras hay una pista accesible para discapacitados».