La multinacional gala Bolloré Group „un conglomerado empresarial con negocios en el ámbito marítimo, constructor y financiero„ mantendrá parte del negocio que Hanjin gestionaba en el Puerto de Valencia antes del proceso de liquidación de la naviera surcoreana. Bolloré participaba como socio de referencia en Hanjin Shipping Spain, mercantil cuya sede social está ubicada en el capital del Turia.
La corporación que dirige el empresario francés Vincent Bolloré cuenta con Bolloré Transport Logistics Spain, que logró una facturación de 49,3 millones de euros en 2015, con un beneficio de 2,1 millones. Tras la crisis de la naviera asiática la filial española del grupo Bolloré mantiene los servicios como consignataria de buques y en sus oficinas aglutina casi medio centenar de trabajadores.
El titular del juzgado de lo Mercantil número dos de Valencia admitió el pasado mes de noviembre el concurso de acreedores voluntario de Hanjin Spain. El administrador concursal es la firma consultora y auditora KPMK.
Hanjin Spain logró una cifra de negocio de 18,1 millones de euros en 2015 y contaba con unos activos valorados en 26,3 millones. Sin embargo, en 2014 declaró beneficios de 2,2 millones de euros.
La naviera Hanjin Shipping, que contaba con la mayor parte de sus escalas en España en Valencia y el recinto de Algeciras, puso fin a sus escalas en España antes de someterse a su disolución tras su entrada en concurso de acreedores a finales del pasado verano. Las escalas de Hanjin suponían el 16 % del tráfico de la terminal de TTI Algeciras y el 4 % sobre el total del puerto de Algeciras.
Reclamaciones
Hanjin Shipping ha pospuesto hasta el 31 de marzo de 2017 la primera reunión con sus acreedores, que le reclaman alrededor de 26.000 millones de dólares (24.570 millones de euros). Las reclamaciones totales registradas hasta el momento suman una cantidad cinco veces superior a los 5.000 millones de dólares (4.725 millones de euros) que aparentemente debía la naviera cuando recurrió a la justicia el 31 de agosto de 2016.
Hanjin Shipping sigue sin cobrar millones de dólares en ingresos por fletes debido a que los cargadores deben ajustar estas cantidades teniendo en cuenta los cargos adiciones y los retrasos que han sufrido a consecuencia de la interrupción de los servicios.
Unos 500.000 TEU (contenedores de veinte pies) , valorados en 11.354 millones de euros, según Cadena de Suministro, quedaron varados en 100 buques por todo el mundo cuando el conflicto entre la naviera y su principal acreedor, el Banco Coreano de Desarrollo, provocó que la compañía solicitara la intervención judicial.
