El visto bueno del Ayuntamiento de Sagunt a que Lafarge pueda seguir explotando la cantera del Salt del Llop se complicó ayer, a 5 días de que el pleno se pronuncie definitivamente, al conocerse la posición desfavorable del jefe de la sección Urbanismo a los pliegos redactados por la Conselleria de Medio Ambiente. Aún así desde el gobierno local se descartó que esa postura fuera la definitiva e incluso se aseguró que el secretario municipal tenía otra visión, partidaria de defender el derecho de la cementera a seguir en la cantera.

La posición de ambos técnicos espera reunirse en un informe único que se llevará hoy a la comisión de Urbanismo y que dictaminarán los grupos políticos; una antesala al pleno del martes donde el consistorio deberá definirse sobre la petición que la empresa realizó hace dos años y que ve vital para mantener su planta, así como 500 empleos directos e indirectos.

Desde el gobierno se sigue sosteniendo que su intención es dar un «sí condicionado» a la continuidad de la cantera. Esto pasaría, a su juicio, por limitar el periodo de explotación hasta 2035 y no hasta 2042 como recogen los pliegos de Consellería. También quieren proponer que se excluya del nuevo permiso de explotación los 21.000 m2 donde, según el ayuntamiento, la cementera ha excavado de más, sobrepasando el límite establecido en la concesión; algo que es objeto de un expediente de infracción urbanística municipal todavía por concluir y que la empresa rechaza. Por último, piden que se reconozca que la multinacional se ha extralimitado en la cota, profundizando entre 15 y 40 metros más de lo permitido, pese a que la firma lo descarta; dos aspectos que hasta ahora también había negado la Consellería y que según el gobierno local ahora reconoce en su último informe. Desde Compromís se garantizaba ayer que siempre apoyarán el informe técnico mientras sus socios del PSPV admitían la complejidad del tema hasta conocer el definitivo.